Periodistas cubanos reiteraron su compromiso con la información libre, a pesar de la aprobación este domingo del nuevo Código Penal, que criminaliza el financiamiento externo de medios de comunicación independientes.
La nueva legislatura establece sanciones de hasta 10 años de prisión a quien “apoye, fomente, financie, provea, reciba, o tenga en su poder fondos, recursos materiales o financieros” de organizaciones no gubernamentales o instituciones internacionales, que puedan ser usados para “sufragar actividades contra el Estado y su orden constitucional”, expresa el documento.
Desde La Habana, la comunicadora Daniela Rojo dijo a Radio Martí que la medida es una variante de la Ley Mordaza.
“Es para eso mismo, para desestimular a los periodistas independientes, para criminalizar lo que viene siendo la realidad, pero ya aprobado en un Código Penal, que ya está tipificado; es decir, lo que le están es dando forma en papel y letra a la dictadura como tal”, afirmó.
El nuevo código pretende penalizar a los activistas y periodistas independientes, sin embargo, el gobierno sí está autorizado a suministrar fondos a organizaciones pro gubernamentales, comenta la comunicadora independiente Aimara Peña González, que reside en la capital espirituana.
“Realmente, el gobierno ha tratado de criminalizar todo el tiempo el financiamiento de la sociedad civil cubana, y lo ha hecho a través de muchísimos métodos. Uno más vendría a ser esta nueva normativa jurídica aprobada en el parlamento”, señaló Peña González.
Alberto Corzo, director del Instituto Cubano de Libertad de Expresión y Prensa (ICLEP), advierte que ahora habrá un aumento significativo del acoso en contra de los comunicadores que ejercen su labor al margen de los medios estatales.
“Los periodistas no vemos la luz al final del túnel. Ahora, con el nuevo Código Penal, se agudizará la maquinaria represiva, sufriremos más represión”, opinó Corzo.
Desde Sancti Spíritus, el periodista Adriano Castañeda recuerda que el parlamento cubano es una extensión del Partido Comunista.
“Las autoridades van a tratar de llevar al límite a todos los que realizan denuncias. Es el caso de los periodistas independientes, quienes están haciendo un trabajo muy importante en las redes sociales, y también en la radio, como es el caso de Radio Martí, denunciado la realidad de Cuba”, dijo.
El director del medio alternativo Amanecer Habanero, que pertenece al ICLEP, Juan Manuel Moreno, asegura que continuará haciendo periodismo en la isla.
“Por medio de este trabajo de periodismo comunitario que hacemos, les llevamos a los cubanos información que les es privada por el oficialismo, y porque muchas personas no tienen acceso a la Internet. Nosotros vamos a seguir haciendo el trabajo. Ya estamos tipificados y declarados como mercenarios, con o sin fondos”, aseguró Moreno.
Desde Guantánamo, el realizador de audiovisuales Anderlay Guerra Blanco opinó que la prensa independiente tiene que seguir adelante.
“Yo muestro rostros, muestro personas denunciando todo lo que les ocurre y, entonces, cuando uno ve este tipo de ley, ya uno se da cuenta de que nos temen”, enfatizó el comunicador.
El nuevo Código Penal cubano también establece restricciones a lo que se pueda publicar en redes sociales y mantiene la posibilidad de la aplicación de la pena de muerte con carácter excepcional.