El preso político Francisco Rangel Manzano pudo estar presente este lunes en el velorio de su padre en la funeraria de Colón, Matanzas, por espacio de dos horas y bajo constante vigilancia de las autoridades penitenciarias de la cárcel Combinado del Sur, ubicada en esta provincia.
Regla Burunate, esposa del opositor condenado a 6 años de cárcel por manifestarse el 11 de julio, dijo a Radio Martí que durante la estancia en el funeral las autoridades no permitieron tomar fotos, pero sí que pudiera saludar a familiares y amigos.
Según relató Burunate, un primo se había encargado de llamar a las dependencias de la Seguridad del Estado para informar del deceso, a lo cual, la policía política respondió tener conocimiento del hecho.
A Francisco lo trajeron a las 10 de la noche y a las 6 de la tarde él se enteró del fallecimiento de su papá, explicó la esposa y aclaró que el opositor fue trasladado desde Matanzas hasta la sede de la policía en la ciudad de Colón.
El miembro del Partido por la Democracia Pedro Luis Boitel llegó a la funeraria escoltado por el director de la prisión provincial Combinado del Sur y dos guardias. "Lo trajeron dos horas y vinieron todos los vecinos. Nosotros suponíamos que lo iban a traer tarde, cuando hubiera pocas personas", relató Burunate.
"A todos los vecinos se les avisó porque yo vivo cerca de la funeraria, se avisó a amistades de él, que fueron y les dejaron acercarse", dijo la esposa.
"Ellos (los militares) se sentaron en un sillón, frente por frente, todo el tiempo vigilándolo. La familia se acercó, los amigos se acercaron pero, todo el tiempo, vigilado", concluyó.
Rangel Manzano y los opositores Tania Echevarría y Leylandis Puentes Vargas fueron condenados a seis años de prisión, por manifestarse pacíficamente el pasado 11 de julio en Colón, Matanzas, según una sentencia dictada por el Tribunal Municipal Popular de esa localidad.