Cuando aún no se había dado a conocer que la Cámara Federal de Argentina revocaba dos procesos legales contra Cristina Fernández de Kirchner, pero confirmaba la solicitud de prisión preventiva, la recién electa vicepresidenta pidió permiso a las autoridades judiciales en Buenos Aires para irse a Cuba a visitar a su hija Florencia.
La ex presidenta solicitó a los Tribunales Orales Federales 2 y 7 que le permitan pasar 10 días en la isla, entre el primero y el 11 de noviembre.
El Tribunal 2 la juzga por supuestas trampas en la concesión de contratos públicos bajo su gobierno, en algún momento entre 2007 y 2015, y en el Tribunal 7 la procesan por presunto soborno y asociación ilícita en el llamado “escándalo de las coimas”.
Ya están en poder de este último tribunal los cuadernos conservados por un chofer que aparentemente se encargaba de recoger y entregar el dinero de los sobornos, pero todavía no hay fecha fijada para iniciar las audiencias judiciales, según reporta Todo Noticias.
Los dos procesos revocados el martes por la Cámara Federal fueron en una causa de gas licuado y en otra de corredores viales. Pero los jueces suscribieron la acusación de que la expresidenta encabezaba una red dedicada a la recaudación de fondos ilegales, según reporta el diario Clarín.
Florencia Kirchner, la hija de Cristina y Néstor Kirchner, permanece en La Habana desde febrero. De acuerdo con su madre, está sometida a tratamiento médico por un trastorno de estrés postraumático y por otras dolencias, descritas como “un síndrome purpúrico y un linfedema ligero en las piernas”.
En diciembre de 2018, la joven había viajado a la capital cubana para participar en el Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano como coguionista del documental El Camino de Santiago, dice Cristina Fernández en un video distribuido en redes sociales.
Entonces “decidió hacer una consulta médica allá, por el prestigio internacional que tiene el sistema de salud cubano, que como todos saben es de altísima calidad”, y “la revisaron y le indicaron que debía comenzar un tratamiento”, explicaba la ahora vicepresidenta electa.
La joven fue invitada nuevamente a La Habana a tomar parte “en un curso intensivo para guionistas de cine” del 18 de febrero al 8 de marzo. Sin embargo, no pudo ni siquiera iniciarlo porque llegó a Cuba con la salud deteriorada, manifiesta su madre, y el 7 de marzo “le prohibieron viajar en avión por el momento, ya que por la patología que padece, no puede permanecer sentada ni de pie por periodos prolongados de tiempo”.
Eso le impidió a su hija volver a Buenos Aires, refiere Cristina Fernández, que asegura que Florencia sufre problemas de salud provocados por la “persecución feroz” a la que la ha sometido la justicia argentina.
Cierra el video con una exhortación para que quienes les odian o les ven como enemigos se metan con ella, no con su hija. Según Telesur, se espera que los tribunales le concedan el permiso a Cristina Fernández para viajar a Cuba, como ha ocurrido en otras seis ocasiones este año.
(Con información de EFE, Europa Press, Telesur y Todo Noticias)
