La escasez de combustible, entre otros factores, agudiza el problema del transporte en Cuba en medio de la crisis económica que vive la isla.
El pasado jueves, 19 de octubre, en el programa de la televisión estatal Mesa Redonda, el ministro de Transporte Eduardo Rodríguez Dávila hizo un análisis del sector, tocando las diversas ramas que dirige, desde el ferrocarril hasta la actividad marítima-portuaria, la aérea y el automotor.
“Cuando se habla de este asunto hay que hacer una separación entre los transportes locales y los intermunicipales o interprovinciales”, dijo en entrevista con la revista informativa Martí Noticias AM el periodista Reinaldo Escobar, Editor Jefe del diario 14ymedio.
En la Habana, posiblemente la ciudad más privilegiada con el transporte, existen todavía rutas de ómnibus que cumplen una salida diaria en dependencia del parque de vehículos, pero en la mayoría de las capitales de provincias, o en las cabeceras municipales, es casi nulo, señaló el entrevistado.
De ahí que los residentes en esos lugares tengan que recurrir al alquiler de particulares o los camiones estatales para trasladarse. Estos camiones no son adecuados para transportar personas, lo que se refleja en la gran cantidad de accidentes ocurridos en esos territorios y que han sido ampliamente reportados por la prensa independiente en la Isla, obligando a las autoridades a hacerse eco de esta situación.
“En el transporte interprovincial, está paralizado el ferrocarril; en el aéreo, solo hay vuelos una vez a la semana, de La Habana a Santiago de Cuba. Recuerdo que Cubana de Aviación tenía vuelos regulares a Santa Clara, Camagüey, a Isla de la juventud, y todos esos vuelos han dejado de existir”, dijo Escobar.
Explicó, además, que en La Habana, de un parque reciente de ómnibus que existía, solo queda la mitad de ellos en funcionamiento. Lo que trae como resultado el largo tiempo de espera en una cola. Añadió que ahora no existen ni siquiera las bicicletas del Período Especial, ni gomas, ni lugares de reparación, ni tampoco zonas privilegiadas para el tránsito de los ciclistas, ni parqueos, lo que hace imposible usarlas como medios de transporte por el peligro de un accidente y de los robos, detalló el periodista.
Escobar habló también de una situación que no se menciona en los medios estatales, el traslado de los estudiantes de la CUJAE, centro estudiantil que está a las afueras de la ciudad, donde estudian alumnos de diferentes puntos de La Habana, a los que se les dificulta llegar por la falta de transporte, y que están imposibilitados también de llegar a tiempo a sus clases. A ellos se suman estudiantes de secundaria o preuniversitario que estudian música o deporte y que deben trasladarse a otros planteles para sus especialidades.
“La situación paraliza las actividades educativas de muchas personas que no pueden trasladarse a diario en un almendrón porque cualquier viaje corto cuesta unos 100 pesos moneda nacional. Esto es solo a grosso modo el tema con el transporte, que es solo uno de los problemas que tenemos”, concluyó el periodista.
Foro