Un proyecto de ley que pretendía otorgar Estatus de Protección Temporal (TPS) contra la deportación a miles de venezolanos residentes en Estados Unidos fracasó el martes en la Cámara de Representantes.
Un total de 154 republicanos votaron en contra de la medida, con lo que no se logró el apoyo de las dos terceras partes de los 435 legisladores que se requieren en debates dispuestos para aprobar rápidamente proyectos de ley que no son polémicos.
Hubo 37 republicanos entre los 268 votos a favor.
El republicano de Florida Mario Díaz-Balart, uno de los patrocinadores de la medida, dijo que él y otros legisladores procurarán una nueva votación durante un debate normal que no requiera dos tercios de apoyo.
"Conceder el TPS a los venezolanos es uno de los actos más bipartidistas que nosotros los miembros del Congreso podemos adoptar ahora mismo”, dijo el patrocinador principal del proyecto de ley, el demócrata Darren Soto.
El republicano por Alabama Mo Brooks se opuso a la propuesta porque "Estados Unidos no puede seguir siendo el orfanato del planeta para niños y adultos por igual” y solicitó un voto nominal que puso fin a la esperanza demócrata de obtener la aprobación en una votación oral.
Un proyecto de ley equivalente no ha prosperado desde que se presentó en el Senado en febrero pasado.
El Departamento de Seguridad Nacional es el organismo que, por lo general, concede el TPS a ciudadanos de países afectados por desastres naturales o conflictos armados, permitiéndoles permanecer en Estados Unidos hasta que su país de origen se recupere.
La Oficina Presupuestaria del Congreso estima que este proyecto de ley beneficiaría a cerca de 200.000 venezolanos que viven en Estados Unidos.
Los venezolanos podrían obtener TPS, y su respectivo permiso de trabajo válido por 18 meses, si han permanecido de manera ininterrumpida en Estados Unidos desde que la medida entra en vigor y pagar 380 dólares al presentar una solicitud.
El presidente Donald Trump dijo en junio que su gobierno sopesaba la posibilidad de conceder el TPS a los venezolanos.
Pero Ken Cuccinelli, director interino del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS por sus siglas en inglés), dijo la semana pasada que adoptar la medida es "más complicado" debido a los recientes fallos judiciales que le han impedido al gobierno de Trump ponerle fin a ese beneficio.
Cuccinelli compartió la explicación al responder una carta que 23 senadores demócratas y el republicano Marco Rubio le enviaron el 23 de marzo, en la que solicitaban a Trump que concediera el TPS a los venezolanos.
La cámara baja adoptó en marzo otras tres medidas sobre Venezuela.
Una de las iniciativas agrega restricciones a la exportación de gas lacrimógeno y equipos antidisturbios. Otra ordena al gobierno de Trump aportar 150 millones de dólares en ayuda humanitaria y la tercera encarga al Departamento de Estado y a los organismos de inteligencia una evaluación de la amenaza que representa la cooperación rusa con Venezuela.
Los tres elementos fueron incorporados a VERDAD Act, un proyecto de ley adoptado en mayo con apoyo bipartidsta por la comisión de relaciones exteriores del Senado, con el que se busca acelerar, junto a organismos financieros internacionales, la planificación para la reconstrucción de Venezuela.
Estados Unidos fue uno de los primeros países en reconocer al líder opositor Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela, con el argumento de que el presidente Nicolás Maduro se reeligió de manera fraudulenta en 2018.