El presidente Donald Trump pidió el lunes a los congresistas que aprueben una ley que exija estrictas revisiones de antecedentes para las compras de armas de fuego tras dos tiroteos masivos durante el fin de semana que dejaron 22 muertos en el Paso, Texas, y 9 en Dayton, Ohio.
"No dejaremos que quienes fallecieron en El Paso, Texas; y el Dayton, Ohio, hayan muerto en vano. Al igual que aquellos que resultaron gravemente heridos", dijo Trump en Twitter.
En un discurso desde la Casa Blanca, Trump afirmó que EEUU debe condenar el racismo, la intolerancia y la supremacía blanca. El presidente agregó que los tiroteos masivos en Texas y Ohio fueron ataques nefastos y crímenes contra toda la humanidad, y aseguró que actuará con una resolución urgente.
Trump dijo que el odio no tiene lugar en EEUU, que el odio deforma la mente, devasta el corazón y devora el alma.
"Estas ideologías siniestras deberían ser derrotadas", dijoTrump sobre los asesinatos que, según las autoridades, parecen ser un crimen de odio con motivaciones racistas.
El presidente expresó su dolor y preocupación el sábado tras los ataques, y ordenó izar las banderas a media asta.
Trump dijo que dio instrucciones al Departamento de Justicia para que investigue el terrorismo a nivel local y propuso la aprobación de leyes que garanticen que los que cometen crímenes de odio y matanzas sean castigados con la pena de muerte.
Legisladores comenzaron de inmediato a pedir reformas en las leyes de porte y compra de armas. Algunos piden prohibir armas semiautomáticas. Otros piden periodos de espera más largos para poder comprar un arma, con el fin de poder investigar los antecedentes del comprador.
Los ataques también comenzaron a influir el debate con miras a las elecciones presidenciales del 2020. Varios candidatos demócratas a la presidencia, los cuales no cuentan con gran apoyo en los sondeos, han aumentado su presencia en la prensa porque son de los estados afectados por los recientes disparos. Ellos son Julian Castro y Beto O’Rourke de Texas y Tim Ryan de Ohio.
También han surgido los ataques al presidente Trump, pues algunos políticos han vinculado estas acciones a sus palabras sobre asuntos de inmigración ilegal. O'Rourke, excongresista de El Paso, dijo el domingo a CNN que Trump es un supremacista blanco.
La declaración fue rechazada de inmediato por Ronna McDaniel, directora del Comité Nacional Republicano. Criticó duramente al candidato O'Rourke por tratar de "revivir su moribunda campaña" con esta tragedia.
“Ningún país tiene este problema de violencia”, dijo el senador demócrata Sherrod Brown tras acusar a los republicanos de no tomar medidas fuertes en materia de control de armas.
“Es una tragedia”, dijo el senador republicano de origen cubano, Marco Rubio.
“Nuestros corazones están rotos y nuestro gobierno también”, dijo Bob Menéndez, senador demócrata, también de origen cubano.
Este lunes, el presidente Trump dijo en Twitter que los medios de prensa tienen una gran responsabilidad sobre la vida y seguridad en Estados Unidos. "Noticias falsas han aportado mucho al odio a través de los años", dijo el mandatario.
Analistas anticipan que a partir de ahora, las campañas tendrán que concentrarse más en los temas de seguridad nacional, inmigración y raza. Estas tragedias podrían cambiar la dinámica de todas las campañas este año, comentó el diario digital Politico.
El joven de 21 años de edad que perpetró el crimen en un centro comercial de El Paso con un arma semiautomática será tratado por las autoridades como un terrorista nacional (“domestic terrorist”).
También podría ser acusado de crímenes de odio, pues Patrick Crusius supuestamente escribió en un manifiesto que los hispanos eran un problema en este país y que simpatizaba con el pistolero anti-musulmán que mató a 51 personas en Nueva Zelanda en marzo.
“Estoy sencillamente defendiendo a mi país del reemplazo cultural y étnico producto de la invasión (de hispanos)”, dice dicho manifiesto.
La policía debe confirmar que él es el autor del texto. El propio gobernador de Texas, Greg Abbot, ha hablado de un posible crimen de odio en este incidente.
El senador cubanoamericano de Texas, Ted Cruz, dijo que el crimen en El Paso fue atroz, un acto de terrorismo y supremacía blanca. Esto no puede ocurrir en El Paso, en Texas, o en cualquier otra parte de la nación, dijo Cruz.
Crusius se entregó a la policía, aparentemente sin resistencia, y la prensa local reporta que está cooperando con los investigadores.
En la ciudad de Dayton, un agresor de 24 años de edad abrió fuego frente a un bar. Tenía una máscara y dos armas. Utilizó un fusil de asalto AR-15. Menos de un minuto después agentes policiales lograron matarlo.
Luego confirmaron que compró el arma por internet y no tenía historial criminal. Las autoridades investigan sus motivaciones.