La policía bolivariana dispersó el martes con gases lacrimógenos una columna de miles de manifestantes que marchaban en Caracas en protesta por la tensión política desatada por la decisión del Tribunal Supremo, luego revertida, de asumir los poderes del Congreso y limitar la inmunidad de los legisladores.
La movilización dejó nueve heridos -uno de bala-, según reportes de medios locales.
Los intentos por llegar desde distintos flancos hasta el Parlamento fueron reprimidos por las autoridades y grupos de civiles relacionados con el chavismo.
El grupo que se dirigió hacia la autopista Francisco Fajardo, la principal autopista de la capital venezolana, fue atacado a tiros por motorizados, según denunciaron varios opositores, como Lilian Tintori, Henrique Capriles y María Corina Machado.
La céntrica Plaza Venezuela, punto de partida de la marcha opositora, había sido tomada desde la madrugada por varios cientos de guardias nacionales y policías que bloquearon los accesos e instalaron cinco tanquetas y cuatro camiones cisternas para impedir la manifestación, que no posee permiso de las autoridades.
Los manifestantes decidieron entonces marchar por las calles aledañas a la plaza al grito de "¡Elecciones ya!" pero su paso fue interrumpido por las fuerzas de seguridad que les lanzaron gases para dispersarlos. Pese a los incidentes la gente se mantenía en el lugar.
"Queremos libertad en Venezuela, esto es dictadura y dentro de poco no habrá comida, ¿esto es lo que quieren para sus hijos?", gritaba a los uniformados María González, enfermera de 56 años.
"Están cerca de caer, somos un país fuerte. Lo que hubo fue un golpe de Estado y la Asamblea tiene que actuar", añadió González, en alusión a las decisiones del TSJ que fueron anuladas parcialmente el sábado.
Doce estaciones del metro cercanas a la zona de las marchas fueron cerradas y en las principales vías de acceso a Caracas fueron instalados varios puntos de vigilancia, lo que ocasionó congestionamientos de vehículos y limitó el ingreso a la ciudad.
El diputado recriminó que miembros de la Policía Nacional Bolivariana impidieran a los parlamentarios cumplir con sus funciones, al no darles paso hacia el Palacio Legislativo, en el centro de Caracas.
"Si el pueblo de Venezuela sigue presionando, sin amedrentarnos, vamos a ver el cambio en todos los niveles del Estado al punto tal de que (el presidente) Nicolás Maduro va a tener que irse", dijo a periodistas el vicepresidente de la Asamblea, Freddy Guevara, durante la concentración.
Oposición insiste en remover a magistrados
El Congreso convocó el martes a una sesión en la que debatirá la remoción de los siete magistrados de la Sala Constitucional, a quienes señalan de haber violado la constitución al emitir la semana pasada dos sentencias en las que asumían las competencias legislativas y limitaban la inmunidad de los diputados.
El proceso contra los miembros del Tribunal Supremo, vinculados al oficialismo, enfrenta el obstáculo de que la única instancia que puede abrirles una investigación es el Poder Ciudadano que integran la Fiscalía General, la Contraloría General y la Defensoría del Pueblo, organismos también señalados de estar controlados por el gobierno.
Fiscalía investigará agresiones a diputados opositores
Por otro lado, el Ministerio Público venezolano informó este martes que investigará las agresiones a dos diputados opositores que resultaron heridos este lunes durante una protesta frente a la Defensoría del Pueblo en contra de la "violación del orden constitucional" por parte del Tribunal Supremo.
La Fiscalía designó a un fiscal nacional "para que investigue las lesiones ocasionadas a los diputados a la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) Juan Requesens y José Brito luego de que un grupo de personas les atacara ayer en las adyacencias de la Defensoría del Pueblo", señaló en un comunicado.
De acuerdo a la información que maneja el Ministerio Público los diputados se encontraban junto a otro grupo de parlamentarios en las cercanías de la Defensoría, en el centro de Caracas, "cuando varias personas arremetieron contra ellos".
La Fiscalía afirmó que iniciara los procedimientos del caso a fin "de esclarecer este hecho y determinar las responsabilidades penales correspondientes".
La crisis política sigue
Aunque los magistrados modificaron el sábado las sentencias contra el Congreso, la crisis política no ha logrado disiparse ni las críticas desde el exterior.
El Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) aprobó la víspera una resolución que declara la violación del orden constitucional en Venezuela. Al rechazar la resolución, el presidente Nicolás Maduro señaló a la OEA de actuar como un "tribunal de inquisición" y promover el "intervencionismo" en el país sudamericano.
Seguidores de Maduro, en tanto, se movilizaron para rechazar la resolución de la OEA, que también resolvió avanzar en gestiones diplomáticas, incluyendo una posible reunión de cancilleres para recobrar el "orden democrático" en el país.
La llegada de los diputados opositores a la Asamblea se conoció por Twitter, pero la sesión igual se aplazó para este miércoles.
"Si no es ahora, es después, y si no, después", dijo Ramos Allup. "Pero vamos a sesionar y sacar a este gobierno", prometió.
(Con información de redes sociales, AP, AFP y EFE)