José Miguel Vivanco, director de las Américas en la organización civilista Human Rights Watch, declaró al diario argentino La Nación que América Latina está en "un muy mal momento, probablemente el peor de los últimos 30 años".
Afirmó en ese sentido que "se han terminado por consolidar dos dictaduras en la región, en Venezuela y en Nicaragua, que se suman a la dictadura cubana, y varios países están sometidos a líderes autoritarios que fueron electos democráticamente pero actúan con total desprecio por el Estado de derecho y las libertades públicas".
Comentó Vivanco que "la influencia de Hugo Chávez y su séquito, combinada con el gradual descrédito de la democracia como modelo de gobierno capaz de mejorar los servicios públicos, combatir la corrupción, la inseguridad y la desigualdad, han dejado el terreno pavimentado para opciones populistas de todos los tonos que hoy proliferan en el calendario electoral".
"Si la América Latina se deja seducir por la prédica populista, estará aún peor", advirtió el representante de Human Rights Watch al rotativo argentino.
"Es necesario fortalecer las democracias y el compromiso con el Estado de derecho", añadió José Miguel Vivanco, quien confirmó públicamente que se retira de su cargo en febrero, pero que seguirá trabajando para promover el respeto a los derechos humanos.
Acerca de Human Rights Watch, dice que es “una organización extraordinaria, altamente profesional”. Y acerca de su futuro, dice que desea “construir sobre lo que he aprendido para ofrecer mi expertise en la solución de conflictos con consecuencias para la vigencia de los derechos humanos”.