Jehová Giré es una edificación del Poder Judicial a medio construir en la barriada de Petare que se ha convertido en hogar de indigentes, damnificados de desastres naturales y caídos en desgracia como consecuencia de la crisis económica que atravieza Venezuela.
Residentes del lugar denuncian que desde hace varios meses no tienen agua, solo cuentan con un baño para todas las familias, la energía es intermitente y las enfermedades ploriferan.
"Este sitio no está estable para estar viviendo aquí con los niños, porque hay mucha epidemia, aquí hay zancudos, cucarachas, ratas, ratones. Incluso hay unos baños que estan dañados y eso le está afectando a los niños" dijo a AFP Roni Aranguren, residente de Petare.
Alrededor de 120 personas, incluyendo 80 niños, viven en este lugar. Los residentes son damnificados que buscan ser ayudados y no considerados como delincuentes, según expresó Erick Hurtado, taxista y residente de Jehová Giré a la agencia francesa.
Por otra parte, la Organización de Naciones Unidas Hábitat, el programa de la ONU que trabaja por el futuro urbano, reconoció a Venezuela como un país líder en garantizar a los ciudadanos derecho a la vivienda.
A través de su cuenta de Twitter, Ildemaro Villarroel, Ministro del Poder Popular para Hábitat y Vivienda, informó sobre el reconocimiento de ONU Hábitat.
Villaroel estuvo en Kenia celebrando la primera asamblea de este programa, donde sostuvo encuentros con homólogos de Serbia, Nigeria, Argelia, Botsuana y Mozambique.
Basado en la Gran Misión Vivienda, programa creado por el Gobierno de Venezuela para la asignación de casas, Villaroel destacó "(...)...Mañana viernes continúa la entrega de viviendas en todo el país! Vamos rumbo a los 3000000 de hogares!".
Sin embargo, las cifras de ENCOVI (Encuesta sobre condiciones de vida en Venezuela) contrastan con el reconocimiendo por parte de ONU Hábitat, ya que las condiciones de muchas viviendas en el país sudamericano no son óptimas para vivir, como le sucede a la comunidad de Jehová Givé.
Según datos de 2018 de ENCOVI, el 51% de la población es pobre, donde el 13% tiene carencias de un saneamiento mejorado, el 23% no dispone de fuentes de aguas mejoradas y el 25% sufre de interrupciones diarias del servicio eléctrico por varias horas.
El sondeo demuestra que sólo el 13% de los hogares venezolanos son considerados NO POBRES. El dato implica un incremento de un 80% en la pobreza entre el 2013 y el 2018 en el país, medida por la línea de ingreso, según información de ENCOVI.
(Redactado por Vanessa Cardona con información de AFP y ENCOVI)
