El espectro de Venezuela pena hoy en los comicios electorales de Colombia y el pueblo tiembla ante la perspectiva de convertirse en la temible nación bolivariana.
Tal como ocurrió en las elecciones presidenciales en Chile, el fantasma de Nicolás Maduro estará presente en las papeletas de los votos, pero los colombianos, abrumados por el éxodo masivo de los que huyen del paraíso chavista, no querrán ser una nueva Venezuela.
Las incesantes caravanas de desnutridos y hambrientos venezolanos son lo suficientes fuertes para los que votarán hoy domingo y en cada mente estarán presentes las propuestas de cada candidato y sus planes de gobierno.
Los candidatos a la Presidencia de Colombia expusieron sus programas en el último debate televisado de la contienda, en el que la crisis de Venezuela y su incidencia en el país abarcó gran parte de la discusiones.
Los cinco aspirantes a la presidencia de Colombia coincidieron en que el país debe actuar firme frente a la caótica situación de Venezuela y cada uno expuso su agenda para esa crisis.
Quedó de manifiesto que el temor al “castrochavismo” es el elemento clave en estas nuevas elecciones en América Latina.
"Vote para que Colombia no sea otra Venezuela". El mensaje está repartido en toda Colombia en vallas en las autopistas y muros de las principales ciudades del país.
Otros carteles promueven el voto por Iván Duque, candidato del partido del expresidente Álvaro Uribe y atacan a su contrincante de izquierda, Gustavo Petro.
Duque y Petro aparecen en los primeros lugares de las encuestas y son los dos extremos de las tendencias existentes en los comicios que se celebran este domingo.
Castrochavismo
Tal como ocurrió en las pasadas elecciones presidenciales en Chile, el temor del electorado colombiano se centra en no querer ser una nueva Venezuela. Millones relacionan a Gustavo Petro con el denominado "castrochavismo" y con Venezuela.
Este domingo se juega en las urnas la elección del sucesor del actual presidente, Juan Manuel Santos, tras ocho años de gobierno. Santos propició con antelación un pacto con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC, teniendo un gran apoyo logístico por parte de La Habana, que incluso fue sede de alguna de las reuniones entre el gobierno colombiano y la guerrilla.
Timochenko
El guerrillero Rodrigo Londoño, conocido como Timochenko, aquejado por problemas cardíacos, buscó dos veces tratamiento en Cuba. De regreso a Bogotá, Timochenko fue sometido a una cirugía a corazón abierto. En vista de la acumulación de problemas de salud renunció a la carrera presidencial, que solo duró tres meses.
El partido político "Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común", la agrupación en que se convirtió la guerrilla de las FARC tras los acuerdos de paz de 2016, indicó que Londoño no sería reemplazado y no presentaron otro candidato para las elecciones presidenciales de este domingo.
Pero las posibilidades del nuevo partido político son pocas según las encuestas de opinión, que han mostrado un rechazo de la mayoría de los electores del país a los antiguos guerrilleros.
La sociedad colombiana está profundamente dividida entre quienes apoyan la reintegración a la vida política de los exguerrilleros y quienes exigen que sus líderes sean encarcelados, en lugar de ocupar cargos políticos.
La llegada de los guerrilleros a la política colombiana sin haber pasado por la justicia, ni siquiera el tribunal especial para la paz que no prevé penas de cárcel para ellos, ha sido uno de los asuntos más polémicos de la política colombiana.
Hoy, el tema de la guerrilla, unido al castrochavismo, estará muy presente en las mentes de los más de 36 millones de colombianos habilitados para sufragar. Veremos el peso real que puedan tener en el marcador de votos.
