En la capital fueron arrestas unas 18 Damas de Blanco y activistas de la sociedad civil, mientras que en Matanzas, en similar ola represiva eran encarceladas 16 opositoras.
Desde horas tempranas del domingo, en La Habana la policía detenía a la Dama de Blanco Daisy Artiles y Bertha Soler, que en la mañana del lunes seguían en la cárcel.
En Matanzas, al menos unas 16 Damas de Blanco fueron arrestadas este domingo por la policía. Tras más de 10 horas tras las rejas, las activistas cubanas fueron liberadas, informó el líder sindical Iván Hernández Carrillo.
Yudayxis Pérez,Lazara Rodríguez, Maira García, María T. Castellano, Asunción Carrillo y Caridad Burunate fueron detenidas en Colón, Matanzas para prohibirles acudir a misa. Junto a las Damas de Blaca fue arrestado Reinaldo Batista, del Partido Pedro Luis Boitel.
Igual situación tuvieron Iglesia Yanelis Moreno, Sisi Abascal y Annia Zamora en Jovellanos. En Cárdenas eran arrestadas Amada Herrería, Marisol Fernandez, Odalis Hernández, Hortensia Alfonso y Cira Vega. En Los Arabos eran arrestadas Mayelin Brave y Yailin Mondeja, antes de que ambas llegaran a la Iglesia local para la misa dominical.
Desde la semana pasada las Damas de Blanco vienen denunciando un operativo alrededor de la sede de la organización en Lawton.
El cerco contra la sede de la agrupación femenina, Premio Andrei Sajarov del Parlamento Europeo, se mantenía este lunes 27 de marzo en horas de la mañana, como denunciaba el ex preso político Angel Moya.
"Estamos en el contexto de 94 domingos represivos contra la campaña 'Todos marchamos' por la liberación de los presos políticos en Cuba", dijo Moya a Radio Martí.
"Desde el jueves fuerzas represivas se habían desplegado en La Habana con el objetivo de vigilar y arrestar a Damas de Blanco para que no asistieran ni en misa ni en la marcha".
Modos de reprimir
La Dama de Blanco Daysi Artiles contó que fue "arrestada violentamente" e incluso fue multada "por violar los dispositivos de seguridad", según comentó a Radio Martí.
A su vez, aludió a la forma en que la Seguridad del Estado la está presionando.
"Me llevaron para la casa de mi hermana, esposada, para que mi mamá me viera", narró. También explicó que su madre padece enfermedades crónicas como hipertensión y diabetes.
"Ya ellos habían amenazado a mi mamá de llevarla un domingo cuando yo estuviera en un calabozo para que ella viera las condiciones en que estaba", agregó.