La apertura del Presidente Obama hacia Cuba es irreversible y las restricciones legislativas restantes a las relaciones entre los dos países - incluyendo la prohibición de viajar y el embargo comercial de EE.UU. – probablemente serán levantadas por el Congreso "antes de lo que la gente piensa", dijo el jueves el consejero de la Casa Blanca Ben Rhodes.
Rhodes, quien, como asesor adjunto de seguridad nacional de Obama encabezó por la parte estadounidense las conversaciones secretas con Cuba que al cabo de 18 meses condujeron al restablecimiento de las relaciones, hizo estas declaraciones en un foro sobre "diplomacia cultural" con Cuba celebrado en el Centro Internacional Meridian de Washington D.C..
"El quid de la cuestión es que el pueblo estadounidense y el pueblo cubano desean de manera abrumadora que esto suceda", dijo Rhodes.
"Francamente, cualesquiera sean las realidades políticas de un país o el otro, quien intente cancelar el proceso estaría actuando en contra del deseo mayoritario de su propio pueblo. El barco ya se fue", opinó el allegado de Obama, citado por The Washington Post.
El congresista Tom Emmer (republicano por Minnesota), uno de los 22 miembros de ambos partidos que pertenecen a un grupo de trabajo de la Cámara de Representantes sobre el tema, corroboró las palabras de Rhodes cuando aseguró en el Meridian que "el 73 por ciento de los estadounidenses están a favor de levantar el embargo".
"Ya no es una cuestión de si se levantará, sino de cuando" expresó Emmer.
A la conferencia del jueves asistieron líderes culturales y de negocios estadounidenses que han aprovechado la apertura y están presionando para ensancharla.
Algunos, sin embargo, criticaron la lentitud con que el gobierno cubano abre sus puertas a reformas económicas que permitan una mayor participación de los norteamericanos..
