Sectores de la prensa en Venezuela y la región apuntan contra el Gobierno de Nicolás Maduro como responsable de medidas económicas que llevaron a varios diarios a no circular en Semana Santa por falta de papel.
Incluso el emblemático periódico El Carabobeño, con más de ocho décadas en circulación, fue impreso por última vez el 17 de marzo, en un episodio que es visto como un atentado contra la libertad de expresión.
"Hoy se ha concretado un vil zarpazo contra uno de los más sagrados derechos del ser humano: El derecho a estar informado", dijo en un editorial El Carabobeño.
Este diario continuará informando a través de su plataforma digital el-carabobeno.com y su estación de radio online.
El Instituto de Prensa y Sociedad de Venezuela (IPYS) informó que las rotativas que imprimen 17 diarios regionales venezolanos, siete de ellos con sede principal en Caracas, estarán detenidas durante la Semana Santa por falta de papel.
También dijo que unos 45 medios están en crisis de papel.
"IPYS Venezuela insiste en que las negativas reiteradas en la entrega de divisas para la importación y la venta de papel periódico, que mantiene al menos a diez impresos fuera de circulación en el país, violan el derecho que tienen los ciudadanos de estar informados y de hacer uso de los medios de información para canalizar públicamente sus denuncias", dijo.
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) también aludió a la actual crisis que viven medios venezolanos:
"Impedimentos al acceso a las divisas para adquirir los insumos básicos que permiten la impresión del diario, como parte de la política de control estatal y castigo a medios independientes".
