El Parlamento cubano aprobó este sábado una nueva ley de inversión extranjera que ofrece incentivos fiscales, para sacar la economía socialista del estancamiento en que se encuentra y generar empleos, informó la agencia Reuters, tras hacerse eco de la televisión estatal en La Habana.
Otra agencia, Prensa Asociada (AP), dijo que las compañías extranjeras no tendrán que pagar impuestos durante los primeros ocho años de operación, y que el Gobierno cubano haría una excepción con las empresas que trabajan en la explotación de recursos naturales, como el níquel o los combustibles fósiles, y establecería tasas de impuestos tan altos como el 50 por ciento.
Al parecer se permitirá la inversión extranjera en todos los sectores excepto el cuidado de la salud y educación, señala AP.
Por su parte, economistas cubanos en el exilio y en Cuba coinciden en señalar que la nueva ley de inversión extranjera, aprobada este sábado por la Asamblea Nacional, es discriminatoria.
Marino Murillo, vicepresidente del Consejo de Ministros, en un reporte difundido en la Televisión Cubana dijo que "Cuba necesita de 2.000 millones a 2.500 millones de dólares anuales en inversión extranjera directa para llevar adelante su modelo socioeconómico socialista, próspero y sustentable (…) No utilizar esas fuentes retardaría el desarrollo nacional", señaló.
"Se le da prioridad a la cooperativa (no estatal) pero donde quiera que haya inversión extranjera debe estar el Estado para controlar la participación de la fórmula no estatal y los extranjeros... Para que no se produzca una concentración de la propiedad lo que se establece en la nueva ley es que siempre tiene que estar el Estado" explicó Murillo.
Murillo hizo hincapié en que la agricultura será uno de los sectores que se va a priorizar para la inversión extranjera así como la producción de alimentos. Con carácter excepcional se permitirá la participación de empresas cubanas no estatales, prioritariamente las cooperativas, indicó AP.
La norma legal "entrará en vigor dentro de 90 días y luego de su publicación en la Gaceta Oficial", informó la agencia cubana Prensa Latina.
La nueva norma reemplaza una legislación vigente desde 1995, cuando Cuba abrió sus puertas al capital extranjero para hacer frente a la crisis económica pos soviética.
La economía cubana se expandió 2.7 por ciento el año pasado, por debajo de los objetivos del Gobierno; una cifra considerada por los analistas muy débil para un país en vías de desarrollo.
Otra agencia, Prensa Asociada (AP), dijo que las compañías extranjeras no tendrán que pagar impuestos durante los primeros ocho años de operación, y que el Gobierno cubano haría una excepción con las empresas que trabajan en la explotación de recursos naturales, como el níquel o los combustibles fósiles, y establecería tasas de impuestos tan altos como el 50 por ciento.
Al parecer se permitirá la inversión extranjera en todos los sectores excepto el cuidado de la salud y educación, señala AP.
Por su parte, economistas cubanos en el exilio y en Cuba coinciden en señalar que la nueva ley de inversión extranjera, aprobada este sábado por la Asamblea Nacional, es discriminatoria.
Marino Murillo, vicepresidente del Consejo de Ministros, en un reporte difundido en la Televisión Cubana dijo que "Cuba necesita de 2.000 millones a 2.500 millones de dólares anuales en inversión extranjera directa para llevar adelante su modelo socioeconómico socialista, próspero y sustentable (…) No utilizar esas fuentes retardaría el desarrollo nacional", señaló.
"Se le da prioridad a la cooperativa (no estatal) pero donde quiera que haya inversión extranjera debe estar el Estado para controlar la participación de la fórmula no estatal y los extranjeros... Para que no se produzca una concentración de la propiedad lo que se establece en la nueva ley es que siempre tiene que estar el Estado" explicó Murillo.
Murillo hizo hincapié en que la agricultura será uno de los sectores que se va a priorizar para la inversión extranjera así como la producción de alimentos. Con carácter excepcional se permitirá la participación de empresas cubanas no estatales, prioritariamente las cooperativas, indicó AP.
La norma legal "entrará en vigor dentro de 90 días y luego de su publicación en la Gaceta Oficial", informó la agencia cubana Prensa Latina.
La nueva norma reemplaza una legislación vigente desde 1995, cuando Cuba abrió sus puertas al capital extranjero para hacer frente a la crisis económica pos soviética.
La economía cubana se expandió 2.7 por ciento el año pasado, por debajo de los objetivos del Gobierno; una cifra considerada por los analistas muy débil para un país en vías de desarrollo.