Georgetown, Guyana - El hospital Saint Joseph Mercy, muy cerca de la embajada de EEUU, no contaba este miércoles con la cantidad usual de cubanos que acuden a esa instalación para la evaluación médica requerida en el proceso de visado en la legación diplomática estadounidense.
Sin embargo, eran suficientes para emitir criterios.
“Hay desorganización, son solo dos médicos certificados por la embajada y la cantidad de pacientes solicitantes de visa aumenta”, dijo a la Martí Noticias, Alexander Fraga, que llegó aquí desde Miami a recibir a su hermana, reclamada por su padre, que no pudo viajar desde EEUU por razones de trabajo.
Los médicos responden a las regulaciones del Departamento de Estado de EEUU por consiguiente, no ofrecen declaraciones a la prensa extranjera como tampoco lo hacen los diplomáticos de la embajada.
“Esto es un hospital privado, los médicos son contratados por Washington y por disposición oficial no hablan con la prensa”, explicó Deborah C. Ramsey, vicedirectora ejecutiva del hospital St. Joseph Mercy al conceder autorización a Martí Noticias para tomar imágenes del proceso de evaluación clínica de los cubanos.
Barbara salió de Cuba y dejó atrás a su bebé de menos de un año. Fueron casi tres años viajando a Cuba con frecuencia para atender a su hijo, pero al mismo tiempo con sumo cuidado de no violar la ley migratoria estadounidense.
“Trabajando y viajando a Cuba siendo residente, llevando desde pañales hasta los alimentos. Muy difícil, fueron casi tres años y hoy finalmente lo tengo conmigo, con la visa por reclamación,“ manifestó la joven radicada en Dallas, Texas, donde “abuelos, y demás familiares esperan al pequeño”.
Los cubanos que buscan la reunificación familiar o visa para visita familiar, viajan unos 3.150 km desde Habana, casi cuatro horas de viaje, hasta llegar a Guyana.
Entre $3.000 y $5.000 dólares es la inversión de Evelio Olivares al reclamar a su esposa y tres hijos.
“Ahí se incluyen los pasajes, el alojamiento y gastos por concepto de alimentación y el examen médico, dijo Evelio que vive en Kansas City.
Sin embargo, según Oscander Rodríguez, propietario de Toma 1, una agencia que brinda servicios a los cubanos en Guyana, no son todos los que tienen motivos para celebrar.
“En las últimas semanas te puedo decir con seguridad que he tenido por lo menos 7 clientes que han venido de Cuba a pedir visa de turista, o sea, para visitar familiares en EEUU y se las han denegado”, dijo el empresario.
Una señora cubana, que optaba por su visa de turismo y que pidió el anonimato por cuestiones personales, dijo a Martí Noticias que cuando el funcionario consular le comunicó el veredicto le dijo: “como sabe su gobierno es enemigo del mío”. Fin de la historia.