Las autoridades de la prisión La Bellotex, en Matanzas, impidieron a la Dama de Blanco Sonia Álvarez Campillo visitar a su hija por ir vestida con el color característico del grupo opositor.
"No me dejaron entrar porque estoy vestida de blanco”, dijo a Martí Noticias Álvarez Campillo, madre de la presa política Saily Navarro, quien también es miembro de la organización.
Álvarez Campillo, quien fue acompañada al penal por su esposo, el recién excarcelado preso político Félix Navarro, dijo que al llegar "salió el oficial que dice llamarse Fernando y nos dijo, a mí y a Félix, que yo no podía entrar porque venía a provocar vestida de blanco, que tengo que ir vestida de otro color para dejarme entrar”. Es la segunda vez que le impiden entrar por esa razón.
Las Damas de Blanco son un movimiento surgido en 2003 por esposas y familiares de los presos de la Primavera Negra, sancionados a altas penas por "actos contra la independencia o la integridad territorial del Estado". Entre ellos se encontraba Félix Navarro.
Tras la liberación de los últimos condenados de ese grupo, las mujeres que integraban el grupo se proclamaron defensoras de los derechos de todos los presos políticos cubanos. El régimen de La Habana las acusa de ser un "instrumento político del imperialismo estadounidense".
La semana pasada, la jefa de la unidad, Martha Cristina Hernández Bacallao, emitió, de forma oral, la prohibición de entrada al establecimiento penitenciario de Álvarez Campillo, siempre que llevara puestas prendas de vestir blancas.
“Le dije que Saily va a ser tres años que está en esa prisión y que yo siempre he venido vestida de blanco y siempre pude entrar”, indicó la madre de la prisionera política.
La activista denunció el carácter ilegal de la medida implementada contra ella y recalcó que “debieran incluir en el reglamento que, a las prisiones, no se puede entrar vestida de blanco”.
No obstante, afirmó que sabe que, si otra persona vestida de blanco intentara visitar a una reclusa, “sí la dejarían entrar”.
Álvarez Campillo denunció que este es otro de los impedimentos y represalias que le han puesto las autoridades penitenciarias en contubernio con la Seguridad del Estado en sus visitas a su esposo y a su hija.
Saily Navarro extingue una sentencia de ocho años de privación de libertad por su participación en las protestas del 11 de julio de 2021 en el poblado matancero de Perico.
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