Estados Unidos ofreció el lunes una recompensa de cinco millones de dólares por un funcionario del gobierno venezolano acusado de tener profundos lazos políticos, sociales y económicos con presuntos narcotraficantes, incluido Tareck EI Aissami.
Joselit de la Trinidad Ramírez Camacho actualmente se desempeña como superintendente de criptomonedas de Venezuela y ha sido acusado en el Distrito Sur de Nueva York por violaciones de la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional, la Ley Kingpin y otras sanciones impuestas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de los EE. UU.
A través del programa de recompensas de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) de la Agencia de Inmigración y Aduanas (ICE) de Estados Unidos, el funcionario ha sido agregado a la lista de los más buscados de la agencia y es un objetivo del Programa de recompensas del Departamento de Estado de los Estados Unidos en un esfuerzo por acabar con la corrupción y la criminalidad vinculadas al régimen de Nicolás Maduro en Venezuela.
El Secretario de Estado Mike Pompeo dijo que esta orden busca llevar ante la justicia a otro funcionario del régimen de Maduro responsable del crimen organizado internacional.
EEUU seguirá trabajando con el Departamento de Justicia "para proteger a los ciudadanos estadounidenses y ayudar a los venezolanos a restaurar su democracia", escribió Pompeo en Twitter.
El gobierno estadounidense ha ofrecido también una recompensa de 15 millones de dólares por la captura de Maduro y de 10 millones por otros funcionarios como Diosdado Cabello, jefe de la Asamblea Nacional Constituyente, Tareck El Aissami y el exgeneral, Clíver Alcalá.