La muerte del general de división Luis Alberto Rodríguez López-Calleja anunciada el viernes por medios oficiales de Cuba ha generado numerosas reacciones que apuntan al gran poder que ejercía desde las sombras en la cúpula gobernante cubana.
Desde La Habana, el activista Manuel Cuesta Morúa dijo a Radio Martí que el efecto de la muerte del asesor presidencial tendrá un impacto "tremendo" en el campo económico y político porque Cuba funciona como una "oligarquía familiar".
Rodríguez López-Callejas formó parte del círculo familiar y de poder más cercano a Raúl Castro. Es el padre de Raúl Guillermo - el Teniente Coronel conocido como "El Cangrejo", encargado de la seguridad de Raúl - y de Vilma, los nietos del general por parte de su hija Deborah Castro Espín.
La salida López-Calleja puede provocar “un terremoto, un temblor” y "va a tener un impacto profundo en la reconfiguración del poder oligárquico en el país", opinó el opositor.
La opositora y economista Martha Beatriz Roque aseguró que "con la muerte de López Calleja van a tener que dar agua al dominó".
La expresa política del Grupo de los 75 considera que la muerte del general de división deja al régimen "sin fichas".
Roque Cabello dijo a Radio Martí que López-Calleja "es una persona clave dentro del sistema de dirigentes ... llegó a manejar la economía del país”.
“El control de muchas de las actividades económicas del país, estaban bajo su poder”, recordó.
De hecho, como zar del Grupo de Administración de Empresas S.A. (GAESA), el general controló casi todas las cadenas de comercios minoristas en Cuba, los hoteles, restaurantes, gasolineras, marinas, flotas de autos de alquiler y empresas importadoras y exportadoras. Su emporio absorbió a las empresas estatales más rentables de Cuba, como la corporación Cimex y a Habaguanex, la próspera empresa fundada por el historiador de La Habana Eusebio Leal. También el Banco Financiero Internacional y FINCIMEX, la empresa que gestiona las remesas a Cuba.
El periodista cubano Abraham Jiménez Enoa escribió en sus redes sociales que con este fallecimiento "el castrismo pierde a uno de sus capos".
"Después de Raúl Castro, en Cuba no había nadie con más poder que López Calleja, su ex yerno que acaba de fallecer. El hombre era el jefe de Gaesa, la empresa militar que administra la economía cubana", apuntó el columnista de The Washington Post.
La reconocida periodista de Miami Ninoska Pérez Castellón también lo describe como líder "Cártel De LaHabana".
"A través de Gaesa controlaba drogas, lavado de dinero, turismo, gas, importaciones, bienes raíces, es decir el trabajo sucio de su ex suegro Raúl Castro, jefe del cartel. Ataque al corazón, ¿natural o inducido?", escribió en Twitter.
El dramaturgo y activista Yunior García Aguilera lo describió como "el verdadero poder, detrás del poder!"
El creador del proyecto Archipiélago se refirió al caos que debe estar generando el fallecimiento del exyerno de Raúl Castro en todos los mecanismos del poder en la isla.
"Ahora sí se armó la gorda en Cuba. ¿Qué estará pasando detrás del telón?", se preguntó el artista.
Desde La Habana, el periodista del diario digital independiente 14ymedio, Reinaldo Escobar, contó a Radio Martí cómo fue recibido el anuncio de su fallecimiento.
“La noticia del fallecimiento ha causado un tremendo impacto en todas partes... los medios opositores, en los militares, en la gente que controla la economía y sobre todo también, claro está, en la población cubana que ha tomado por sorpresa el fallecimiento de un hombre que era tenido como una especie de presumible relevo, el cacique joven que estaba ahí esperando a ver qué pasaba y el hombre que se sobrentiende que tenía el control de los más importantes renglones de la economía cubana, entre ellos, el turismo”, afirmó Escobar.
“López Callejas dirigía con bastante mano fuerte, tenía secuestrada a una parte de la economía cubana porque las entidades de GAESA no son objeto de verificación por la Contraloría de la República, no hay inspecciones a las unidades de GAESA, incluso no hay una información al Parlamento de los resultados económicos de esta empresa. Nunca han hecho un informe, no se sabe a dónde va a parar el dinero que ganan y qué se hace con eso”, alertó.
La escritora cubana Wendy Guerra escribió en sus redes sociales que la muerte de el general de división "cambia el mapa político cubano, pero sobre todo, impide que el efecto Putin se manifieste desde su figura, tan desconocida como clave en la política del país".
Desde Estados Unidos, la congresista cubanoamericana María Elvira Salazar opinó que "el castrismo pierde un hombre clave en su brutal maquinaria".
"El general López-Calleja estaba en el negocio del poder y se enriquecía al frente de la empresa militar. Estos sátrapas no son inmortales. ¡Que Dios tenga compasión de él, porque el pueblo cubano no la tendrá!", escribió la representante republicana.
En Miami, el coordinador de la Asamblea de la Resistencia Cubana (ARC), Orlando Gutiérrez-Boronat, dijo que el general de división “era el encargado de las finanzas de la familia Castro” y estaba entre “los cinco más poderosos” de la cúpula gobernante.
El opositor Jorge Luis García Pérez ‘Antúnez’ recordó que “López-Calleja se mostraba con perfil bajo, pero tenía mucho poder dentro del régimen”.
“Este señor era una de las personas destinadas a darle continuidad al régimen”, señaló el activista, exiliado en EEUU.