La familia de Bismark Vaillant Navarro, de 35 años y residente en La Cuevita, San Miguel del Padrón, denuncia públicamente las circunstancias que rodearon su muerte tras un violento asalto ocurrido el pasado 11 de noviembre en La Habana.
La cuñada del fallecido, Yaime Isaac, habló con Martí Noticias y relató el calvario que vivió el joven desde el ataque hasta su muerte, este lunes, en el Hospital Calixto García de la capital cubana.
Martí Noticias también contactó telefónicamente con la esposa del fallecido, Yasmania Isaac, quien confirmó los hechos narrados por la familia.
Una trampa mortal a través de redes sociales
Según el testimonio de Yaime Isaac, Vaillant Navarro coordinó la compra de cigarrillos mediante un grupo de compraventa en Facebook. Atraído por un precio favorable, acordó encontrarse con el presunto vendedor en un punto cercano al Malecón, por la zona del hospital Hermanos Ameijeiras.
“Mi cuñado quedó con un muchacho que insistía mucho en que llegara rápido”, explicó Isaac.
Bismark acudió acompañado de un chofer y la esposa de este. Al llegar, el supuesto vendedor lo condujo hacia un edificio. Dentro del inmueble lo esperaban otros seis hombres, quienes lo golpearon violentamente para robarle los 700 mil pesos que llevaba para la compra.
Golpiza, caída y un intento de auxilio frustrado
El chofer permaneció en la planta baja, pero al escuchar el tumulto trató de intervenir. Según narró Isaac, el hombre fue apuñalado en la pierna por uno de los asaltantes, aunque logró escapar con lesiones leves.
Vaillant Navarro fue lanzado desde un tercer piso, provocándole heridas gravísimas, entre ellas traumatismo craneal severo, múltiples coágulos, fracturas y dificultades respiratorias extremas.
Negligencia en el hospital y una odisea para recibir atención
El chofer y su esposa trasladaron al herido al Hospital Calixto García. Allí comenzó, según la familia, un episodio de desatención y carencias que marcó los últimos días de vida del joven.
Isaac señaló que no había ambulancias especializadas disponibles para trasladarlo dentro del propio hospital para realizarle un TAC urgente. La familia tuvo que pagar 18 mil pesos para obtener un vehículo que permitiera moverlo sin desconectarlo de los equipos de soporte vital.
Tras el estudio, los médicos determinaron que no podían operarlo debido a la gravedad de las lesiones. Fue regresado a la sala de cuidados intensivos donde, según la denuncia, desarrolló escaras y mal olor corporal por falta de higiene y manejo adecuado.
“En solo cuatro días ya tenía escaras en el cuerpo…, yo digo que ya se estaba pudriendo”, lamentó la cuñada, visiblemente afectada durante la entrevista.
Vaillant Navarro permaneció conectado a una máquina para poder respirar durante seis días. Falleció este 17 de noviembre, a las 6:00 de la mañana, oficialmente por un paro respiratorio.
La familia sostiene que la autopsia reveló líquido en los pulmones, múltiples coágulos en la cabeza y lesiones compatibles con la caída y la golpiza.
Una investigación estancada
Pese a la gravedad del crimen, la familia denuncia que la policía no ha avanzado en la investigación.
Las autoridades informaron que en el lugar del asalto había cámaras de seguridad, pero hasta la fecha no han ofrecido detalles, ni han anunciado detenidos o identificado a sospechosos.
La familia solicita colaboración ciudadana para identificar a los, aproximadamente, seis hombres involucrados en el crimen.
Foro