El jueves, en llamada telefónica desde el penal Combinado del Este, en La Habana, el comunicador y prisionero político del 11J, Jorge Bello Domínguez, denunció que está siendo hostigado por guardias del centro penitenciario, por órdenes de la Seguridad del Estado.
En declaraciones a Radio Martí su madre, Martha Domínguez, relató: “A las cinco y cuarto recibí una llamada de Jorge Bello Domínguez donde me dijo que estaban tomando represalias con él. Se sintió mal y le han negado la asistencia médica […] él tiene que inyectarse la insulina dos veces al día y querían que él se desnudara, él se negó, porque para ponerse una insulina no hay que desnudarse”.
“Él se quejó y lo bajaron a la dirección (del penal) y en la dirección, lo obligaron a arrodillarse como si él tuviera que pedir perdón y él no tiene que pedir perdón por nada porque él no ha hecho nada y ellos saben muy bien que él es inocente”, aseguró la madre del comunicador sentenciado a 15 años de prisión por el Tribunal Militar Territorial Occidental.
El periodista fue procesado por los presuntos de “sabotaje con carácter continuado”, “robo con fuerza”, “desórdenes públicos” y “desacato”, por su participación en las protestas populares del 11 de julio en el poblado de Güira de Melena, en la provincia de Artemisa.
En su cuenta de Twitter, la economista Marta Beatriz Roque, la única mujer prisionera política en el “Grupo de los 75”, cuando la represión del régimen castrista dio lugar a la conocida como “Primavera Negra de Cuba”, hizo referencia al intento por parte de la policía política de humillar a Bello Domínguez.
Bello Domínguez inició una huelga de hambre el pasado 8 de abril como protesta por las irregularidades jurídicas y abusos cometidos por las autoridades cubanas con su caso, pero abandonó la misma por solicitud de su madre.
“Jorge abandona la huelga producto de una nota que yo le mandé con un muchacho, del que no puedo revelar su identidad, donde le explicaba que las guerras no se hacen así; al diablo hay que entrarle de frente, y por eso él abandonó la huelga”, relató.
En referencia a la campaña por la amnistía que llevan a cabo organizaciones de la sociedad civil cubana, la madre del prisionero político expresó que ella conversó con su hijo y asegura que él “no comparte el problema de la amnistía por la sencilla razón de que el Estado cubano quiere ‘almacenar’ la situación, quiere mostrarse al mundo como un país benévolo, lo cual no es así”.
“Jorge quiere que queden anuladas todas las sanciones contra los manifestantes del 11 de julio, pero no a través de una amnistía; que los liberen reconociendo que ellos son inocentes, no sirve de nada que los liberen y siga igual la situación del país. Por eso él no acepta esa amnistía”, aseveró Domínguez.
[Con reporte de Tomás Cardoso para Radio Martí]
