La crisis migratoria cubana en Latinoamérica destapada desde noviembre del pasado año ha ido mostrando diversas aristas que cobran vida a partir de los testimonios de los protagonistas.
Se trata del drama humano de miles de cubanos que buscan llegar a Estados Unidos.
Un equipo de Televisión Martí obtuvo un insólito testimonio mientras cubría en Ecuador, país donde suele comenzar la odisea de los cubanos.
Una visita a los alrededores del Hotel Carrión en Quito, utilizado como prisión para las personas con condición migratoria irregular y en proceso de deportación, puso al periodista Ricardo Quintana frente al caso de Yunier Leyva Báez, quien respondió a preguntas a través de las rejas.
Autoridades del penal no permitieron el ingreso del periodista y el camarógrafo. Otros 10 cubanos que estuvieron presos en este hotel fueron deportados a Cuba en mayo.
-“¿Por qué estás ahí?”, fue el comienzo de la peculiar entrevista que permitió al periodista apostado en la calle que pasa frente al hotel, obtener el testimonio de Leyva Báez.
- “Por gusto. Me sancionaron a tres meses en El Inca (Centro de Rehabilitación Social) por robarme mi propia moto. Me acusaron por un delito de receptación que nunca cometí y de ahí me trajeron para acá sin derecho ninguno para deportarme", gritó para poder ser escuchado.
Esta información no pudo ser confirmada de forma independiente.
"Yo soy profesional, soy máster en Ciencias de la Educación, licenciado en Cultura Física y especialista en Metodología de la Investigación”, agregó.
A Quito pueden llegar relativamente fácil los cubanos.
Hasta fines del pasado año no necesitaban visas para llegar, pero ante la creciente crisis y la presión de otros países, el Gobierno de Rafael Correa determinó imponer este requisito.
Hasta la fecha Ecuador continúa otorgando visas de turistas a los cubanos.
El deseo de llegar a Estados Unidos
Leyva, -que según explicó que fue colaborador internacionalista en Venezuela y militante del gobernante Partido Comunista hasta el 2015-, lleva 19 días preso en el Hotel Carrión, después de pasar otros cuatro meses en el centro penitenciario de El Inca.
"Todos tenemos derechos a emigrar y existen leyes en este país que nos pueden sacar a la calle con alternativas para tenernos controlados en la calle hasta que podamos regularizarnos. Eso es lo que queremos", explicó.
La Defensoría del Pueblo ha dicho que la privación de la libertad por la condición migratoria, criminaliza la migración y vulnera otros derechos reconocidos en el ordenamiento jurídico ecuatoriano.
Sin embargo, esta no es la única denuncia de cubanos recluidos en este sitio por su situación migratoria. Al menos 10 fueron deportados a Cuba en mayo pasado.
Leyva dijo que se fue de Cuba "por problemas políticos" y dijo que aspira solicitar refugio. Aludió a su militancia en UNPACU en La Habana, pero un pariente suyo dijo que Leyva no es activista del grupo.
"No, eso sí es falso. Si es familia mía, primo hermano, pero no es de UNPACU", dijo a TV Martí el representante de UNPACU en La Habana, Aracelio Molina Leyva.
"No voy a decir mentiras, precisamente unas de las máximas de la oposición pacífica es que no se puede decir mentiras. El día que un opositor diga una mentira a sabiendas, hasta ese día deja de ser opositor pacifico porque se pone en manos de la policía política", explicó su familiar.
No es el primer caso de cubano en situación migratoria adversa que asume una postura política improvisada como opositor a fin de obtener asilo político.
