Johan Pérez Leyva, otro médico cubano acosado por la policía política por denunciar en las redes sociales la situación de la atención primaria a pacientes en la isla, y la falta de medicamentos hasta para paliar las dolencias más básicas, dijo a sus interrogadores que sus principios "no claudicarán".
"Me dijeron que no era necesario que yo hubiese hecho ese video, que no era necesario que yo lo hubiese subido a las redes sociales porque ellos no me iban a torturar, que no me iban a meter preso, que el sistema no funcionaba así. Sí me aclararon que, de yo continuar, corría el riesgo de que en otra ocasión nos volviéramos a ver allí, y entonces ya no iba a ser un tema profiláctico, ya sería para imponerme una sanción", explicó el médico a la periodista Ivette Pacheco, de Radio Martí.
En una transmisión en vivo por Facebook tras acudir el jueves a una citación de la policía, el galeno dijo que, durante el interrogatorio, conducido por un oficial de la Seguridad del Estado, intentaron convencerlo de que sus ideales "no son los correctos" y le recordaron "los principios revolucionarios" de su familia, a lo que respondió que esos no son los ideales que defiende.
Antes había escrito en la red social: "Estuve en la unidad de instrucción y sostuvimos una conversación en un ambiente sin presión. Ellos expusieron su parte y yo la mía, pero al final no voy a cambiar mis ideales políticos ni el trabajo que estoy realizando. No soy yo quien está equivocado y ni hay manera de que me muestren lo contrario. Quiero una Cuba libre y sin dictadura!!!".
Según Pérez Leyva, sus interrogadores le prometieron que "alguien del ministerio, de la Seguridad, o del gobierno, va a caminar conmigo, después de tanto tiempo que estuve pidiéndolo, para que yo pueda mostrarles, casa a casa, la situación de la población".
"Yo, por supuesto, los voy a llevar, si están en la disposición de caminar en serio, para que vean cómo vive esa población", dijo en referencia a los #casos sociales" a los que el grupo ayuda, pero advirtió que sus principios seguirán siendo los mismos.
"Una cosa les digo, yo no voy a cambiar mis ideales, lo que pienso, lo que defiendo y por lo que lucho, no voy a cambiarlo, aunque eso ponga en juego mi título, aunque eso ponga en juego mi trabajao, pues no tengo ningún problema con pedir la baja, porque tampoco pienso apoyar un sistema que está creado a base de mentiras, a base de cifras infladas, a base de datos inventados (...). Mis convicciones no me las va a quitar nadie", afirmó.
El médico del consultorio número 38 en la ciudad de Las Tunas, y especialista en medicina general integral, lidera en Facebook un grupo de ayuda a personas que viven en condiciones precarias en su comunidad. Todo comenzó cuando dio a conocer en la red social la situación de un paciente postrado, que -asegura- no ha recibido la debida atención médica, ni asistencia social, por parte del estado cubano.
"Yo lo ayudé varias veces, le compré los medicamentos que usaba... tiene más de tres enfermedades crónicas. Presenté el caso a los trabajadores sociales y nunca le dieron respuesta (...)", señaló.
Según Pérez Leyva, desde el 2016 la hija del enfermo está solicitando una silla de ruedas "y está es la altura que le están diciendo que no entran sillas de ruedas al país, y que cuando entre tiene que pagarla... 500 pesos, que es mucho más de lo que le pagaban por asistencia social", denunció el galeno a Radio Martí.
En meses recientes, otros dos médicos, los doctores Alexander Pupo Casas y Manuel Guerra, ambos residentes en la provincia Holguín, han sido acosados y reprimidos por la Seguridad del Estado cubana debido a sus denuncias en las redes sociales y sus críticas al régimen cubano.
(Incluye reporte de Ivette Pacheco para Radio Martí)