El polvo de desierto del Sahara llega al Oriente de Cuba en el momento que los cubanos deberán lidiar con los rigores de la pandemia del coronavirus en el inicio de la fase de recuperación y los posibles virus, ácaros patógenos, que arrastra el polvo del desierto, alertaron medios locales a la población.
Desde muy temprano en Baracoa se observaba el cielo opaco y los reportes de radio de la Ciudad Primada de Cuba daban cuenta del calor y alertaban del uso de la mascarilla al salir a las calles.
Una situación similar ocurría en Guantánamo donde al mediodía del miércoles persistía una "nublazón enorme, nunca vista, un tremendo calor, y una sensación muy extraña en el ambiente ", aseguró a Radio Televisión Martí el activista Niober García.
En la radio local de Guantánamo dijeron que era importante "tomar agua y que las personas con problemas respiratorios fueran precavidos porque pueden tener problemas", agregó García.
El polvo desértico afecta la salud humana. Los virus, ácaros patógenos y bacterias pueden ocasionar problemas en la piel y alergias. También transporta un hongo endémico de África que incide negativamente en los arrecifes de coral, alertó el diario oficial Granma.
También en Santiago de Cuba los efectos de la nube de polvo, son notables y se espera que para el próximo día el impacto sea mayor, dijeron medios locales.
En su perfil de Facebook el periodista Santiago Romero Chang mostró imágenes de la ciudad desde donde "no se puede ver la Sierra Maestra", apuntó el reportero.
A los rigores del calor, generados de polvo sahariano, se suma la necesidad de usar las mascarilla para evitar el contagio.
El médico Ramón Zamora residente en Holguín cree que es necesario ponérsela y mucho más aquellos que padecen de alergias y asma.
En la ciudad de Holguín hoy todo está cubierto por "una especie de neblina densa que no deja ver el sol y hay un calor insoportable", dijo.
Es un momento muy difícil para los asmáticos, y todos los que tengan trastornos respiratorios. Además de usar el nasobuco, es recomendable mantener puertas y ventanas cerradas y si no es necesario no salir de casa, agregó el médico.