La propuesta de congresistas estadounidenses de que el gobierno de Estados Unidos suministre un servicio de Internet libre a los cubanos en la isla parece alejarse cada vez más de la realidad.
La iniciativa de propiciar acceso digital a los cubanos surge luego que la estatal Empresa de Telecomunicaciones de Cuba S.A. (ETECSA) sometiera deliberadamente a los cubanos por más de siete días a cortes de Internet, censura de redes sociales y disminución de la velocidad de conexión con el propósito de intentar contener el flujo de información generado desde el levantamiento nacional del 11 de julio.
El mes pasado, la convocatoria a la Marcha Cívica por el Cambio en Cuba prevista para el 15 de noviembre se vio frustrada, en parte, por los cortes de Internet y de servicios de datos a los principales promotores y a sus familiares desde las jornadas previas a la marcha. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y su Relatoría Especial para la Libertad de Expresión (RELE) denunciaron esta estrategia como parte de las medidas represivas e intimidatorias para impedir la marcha cívica convocada por Archipiélago.
La representante republicana por Florida, María Elvira Salazar, quien ha encabezado un proyecto en la Cámara de Representantes para suministrar a los cubanos acceso abierto y gratuito a la red de redes desde EEUU, dijo este viernes a Radio Televisión Martí que esta iniciativa no progresa por la falta de voluntad política.
“Me he reunido con dos compañías independientes que tienen la tecnología lista para hacer funcionar la Internet para Cuba, pero hasta que la Administración Biden tome medidas no hay forma de avanzar. Hasta ahora se han negado”, manifestó la cubanoamericana.
El miércoles, en una comparecencia ante el Comité de Relaciones Exteriores del Senado sobre la política de EEUU en cuanto a la democracia en América Latina y el Caribe, Brian A. Nichols, Subsecretario de Estado de EEUU para Asuntos del Hemisferio Occidental, mencionó algunos de los obstáculos actuales para concretar el plan.
“El primero es la cantidad de ancho de banda que ingresa al país, que es bastante limitado. Si hubiera un mayor ancho de banda en general, habría una mayor capacidad para acceder a Internet a velocidades más altas”, refirió el funcionario.
Asimismo, dijo que el régimen utiliza una serie de tecnologías y técnicas para bloquear el acceso a Internet a personas, a pequeños grupos de personas, a ubicaciones geográficas específicas y, en realidad, no suele cerrar todo Internet en la isla.
“Por lo tanto, vencer esas técnicas y tecnologías es un enfoque importante de nuestros esfuerzos”, explicó.
Nichols mencionó la idea de proyectar una señal inalámbrica en la isla, “ya sea desde un globo o un avión o desde una ubicación estática” cuando las autoridades cubanas estén activamente tratando de interferir.
La congresista Salazar junto a una decena de colegas políticos presentaron ante el Congreso la Ley de Libertad Estadounidense y Acceso a Internet, un proyecto que implementa la “Operación Starfall”, plan estratégico para brindar acceso a las comunicaciones inalámbricas en el extranjero en medio de apagones, desastres “o cuando los regímenes deshonestos" como el de Cuba "cierren el acceso a Internet”.
En julio, la Casa Blanca publicó el documento Hoja Informativa: Medidas de la Administración Biden-Harris sobre Cuba en el cual se detalla la política del gobierno de Estados Unidos hacia la isla y donde se da especial atención a la Internet libre para Cuba.
Por su lado, el Senado aprobó en agosto una enmienda a su presupuesto presentada por los senadores republicanos de Florida Marco Rubio y Rick Scott, a fin de facilitar el acceso a Internet en Cuba.
Pero esta semana las declaraciones a la cadena televisión NBC que formuló Juan González, el principal asesor de la Casa Blanca para América Latina, dejan poco espacio a la posibilidad de que el proyecto cristalice.
González dijo que la administración ha dedicado una "cantidad excesiva de tiempo" a analizar el tema de la conectividad a Internet y revisó lo que hizo la administración Trump con el Grupo de Trabajo de Internet para Cuba que creó.
"No existe una solución realmente técnica y fácil, ni existe la tecnología para tener conectividad a Internet, por lo que deberíamos centrarnos en cómo circunvalar la censura", indicó.