El pasado jueves cumplió 51 años de edad el prisionero político y líder de la Unidad Camagüeyana, Virgilio Mantilla Arango, aislado en celda de castigo en el penal Cerámica Roja, en la ciudad de Camagüey, con serios problemas de salud, sin derecho a visitas.
Mantilla Arango aún no ha recibido la sentencia tras el último juicio que se realizó en su contra hace 17 días, donde el tribunal ratificó la petición fiscal de tres años de privación de libertad, informó a Radio Martí su esposa Ángela Emilia Nodal Hernández, quien acudió al penal para verlo y no tuvo éxito.
“Fui a la prisión a ver a mi esposo y no me lo dejaron ver”, lamentó Ángela Nodal, quien le había llevado “un almuerzo” por motivo de su 51 cumpleaños.
"Primeramente, no me querían dejar pasar el arroz”, hasta que la esposa de Mantilla Arango convenció a un oficial que, al final sí le permitió pasar la comida al prisionero político.
Nodal dijo que cuando indagó sobre el tiempo que su esposo debía permanecer en la celda de castigo, el "Mayor" le respondió que iba a estar como mínimo tres meses “por medidas de seguridad".
La señora explicó que Mantilla se mantiene con dolores, aislado, y que no tiene todos los medicamentos que requiere.
Mantilla Arango fue condenado en diciembre de 2020 a siete meses de privación de libertad por el supuesto delito de "acaparamiento".
Cuando fue liberado en julio, solo estuvo en libertad por unos pocos días porque fue arrestado el día 16 en el municipio Céspedes, donde reside, y el 23, el Tribunal Municipal de Florida lo condenó a nueve meses de prisión por el delito de "desacato".
(Con reporte de Tomás Cardoso para Radio Martí)
