El cardenal José Luis Lacunza visitó la sede de la Pastoral Social Cáritas en Ciudad de Panamá, devenido albergue de más de 300 cubanos que permanecen en ese país de manera irregular.
El religioso accedió así a la petición que le hiciera el diácono Víctor Luis Berrío, secretario ejecutivo de la Pastoral Social Cáritas, con “la intención de que tuviera una experiencia en carne propia”.
“La visita reviste vital importancia porque refrenda el respaldo de la Iglesia Católica a la causa de estas personas”, comento Berrío.
Monsenor Lacunza, actual obispo de la Arquidiócesis de Chitré, en la provincia de Chiriquí, en la frontera con Costa Rica, “compartió, sonrió con ellos y les dio consuelo y esperanza”, indica una nota que aparece en la página de Facebook de Cáritas Panamá.
“Estuvo hora y media con nosotros”, relató Berrío, “no es lo mismo hablar y que te cuenten que ver esta pequeña ciudad de toldas, tanta gente que duerme a la intemperie, en el piso, en los pasillos, donde pueden”.
Panamá no era destino de los cubanos. Ahí quedaron trabados en ruta hacia EEUU luego de que el 12 de enero último el entonces presidente Barack Obama dejó sin efecto la disposición "pies secos/pies mojados".
“Ellos entraron al país con un permiso de estadía, y estando aquí, la Casa Blanca canceló la normativa que les permitía ingresar a EEUU. Por eso, no son ilegales, sino irregulares. Sabemos el nivel de persecución que hay en Cuba, si son repatriados sería una condena”, manifestó el directivo de la pastoral.
Propuestas de Cáritas para dar solución al caso de los cubanos
A diferentes instancias del gobierno de la República de Panamá, ha propuesto Caritas alternativas en busca de una solución a la situación de los cubanos.
“Primero, en lugar de deportación como demanda el Servicio Nacional de Inmigración, que se haga un retorno voluntario”, dijo el directivo al referirse a algunos cubanos que desesperanzados y agotados, incluso psicológicamente, consideran regresar a la isla.
Otra de las propuestas es que algunos de los que desean regresar reciban una bonificación como pequeños empresarios y se conviertan en compradores de la Zona Libre en la ciudad panameña de Colón.
“Pueden suministrar productos a empresas cubanas y se les otorgaría una visa de entrada múltiple a Panamá,” sugirió Berrío.
Asimismo, el traslado a terceros países aparece en el pliego de propuestas, y en este sentido dijo: “podría ser Canadá, Chile o cualquier otro país que esté dispuesto a acogerlos”.
Por último, la visa humanitaria que permitiría a los cubanos reiniciar vida en Panamá con el concebido permiso de trabajo.
“También estamos pidiendo que se permita el traslado de los 69 cubanos que están en Lajas Blancas, provincia Darién. Para ellos tenemos un alberque habilitado en la iglesia Santa Ana”, informó Berrío.
Además, se solicita al gobierno que deje en libertad a los que se encuentran recluidos en centros de detención, siempre y cuando no hayan cometido delitos.
El gobierno de Panamá no se ha pronunciado, ni revelado cuáles son los pasos a seguir con el destino de los cubanos.