Las compensaciones que reclaman las empresas estadounidenses por los bienes confiscados en Cuba desde 1959 están presentes en la agenda de las autoridades norteamericanas después de que la semana pasada Obama y Castro anunciaran el restablecimiento de relaciones diplomáticas.
Estados Unidos tiene recogidas más de 5.900 reclamaciones contra Cuba por la expropiación de los bienes tras la revolución, según la Comisión de Solución de Reclamaciones en el Extranjero, del Departamento de Justicia. En total, por un valor de 1.8 billones de dólares en su momento, calculadas en más de 7 billones a día de hoy con los intereses.
A este respecto, la vocera del Departamento de Estado, Marie Harf, declaró en una comparecencia sobre varios asuntos que éste es un tema esencial en el nuevo escenario entre ambos países, pero que “estas cosas no van a ser resueltas antes de que se normalicen las relaciones diplomáticas”. Añadió que, obviamente, “este tema será parte de la conversación”.
Todo esto es parte “de un proceso” -sostuvo- del que no existe un calendario para resolver estos temas. En cualquier caso, el hecho de tener relaciones diplomáticas hará más fácil que se puedan resolver todas estas reclamaciones.
Entre las compañías con mayores cantidades adeudadas por las expropiaciones cubanas se encuentra Coca-Cola, que estima en 27 millones de dólares las pérdidas en maquinaria e inmuebles. Otras como Exxon Mobil y Colgate-Palmolive también tratarán de recuperar su parte, aunque la mayor de las demandas corresponde a una filial de la compañía de materiales de oficina Office Depot.
Puedes ver el vídeo completo con la declaración de Marie Harf sobre Cuba aquí.
