El líder opositor José Díaz Silva fue detenido y acusado de "amenaza" este fin de semana, y desde entonces permanece en la unidad policial de Santiago de las Vegas, en La Habana.
Su esposa, la activista Lourdes Esquivel, dijo a Radio Martí que el arresto ocurrió tras un incidente con una vecina que había irrumpido en su propiedad con la intención de robar.
La vecina, explicó Esquivel, "se metió en una finquita que nosotros tenemos a robarse unos plátanos", y el opositor la confrontó.
"Yo le decía que saliera, y Silva le decía que saliera de ahí, porque hay una cerca [pero] ella no quería salir. Ella tenía un machete en la mano y un racimo de plátano. Ella estaba junto a su esposo. Silva fue, le quitó el machete, y se lo tiró para otra finca. Ellos se llevaron el racimo de plátanos", señaló la activista.
El domingo, en horas de la mañana, Silva salió de su vivienda y "de pronto tenía su teléfono apagado", dijo su esposa. Un rato después llegó la Policía a "tirar fotos, tomarme declaraciones de los sucesos, y me dijo que Silva estaba acusado de amenaza, que esa señora había denunciado que Silva la había amenazado", añadió.
Según Esquivel, la vecina trabajó en el Consejo de Estado. "Ella era militar y fue expulsada de allí por corrupta", afirmó.
Las autoridades dijeron a Esquivel que el opositor tenía que estar unas 24 horas detenido para la investigación. "Espero que todo se haya aclarado y que la Policía sepa que ella (la vecina) es una ladrona, que ella no tiene por qué estar metida en nuestro patio", concluyó.
Varios opositores y activistas exigieron en las redes sociales la liberación inmediata de Silva, entre ellos la líder de las Damas de Blanco Berta Soler, que denunció el hecho en su cuenta de Facebook.
El opositor Manuel Cuesta Morúa criticó en Twitter que siendo Silva la víctima de "un claro intento de robo", tenga que rendir cuentas ante la justicia por lo sucedido.
(Con reporte de Ivette Pacheco para Radio Martí)
