Estados Unidos condenó este lunes la injusticia cometida por el régimen cubano contra los manifestantes del 11J menores de edad sentenciados a largas penas de cárcel por su participación en las protestas antigubernamentales del verano pasado en la isla.
"Por sumarse a las manifestaciones en La Habana, el régimen cubano condenó a 7 menores a prisión por sedición, algunos con penas más largas que su vida. Condenamos esta injusticia contra los niños", señaló la Embajada de EEUU en Cuba en su cuenta de Facebook.
Entre los menores condenados por sedición y otros delitos graves contra la Seguridad del Estado se encuentran Kendry Miranda Cárdenas y Lauren Martínez Ibáñez, ambos de 18 años y condenados a 19 años de cárcel; Rowland Jesús Castillo Castro, de 18 años, y sentenciado a 18 años de prisión; Lázaro Noel Urgellés, de 18 años y condenado a 14 años de prisión; Brandon David Becerra Curbelo, de 18 años, sentenciado a 13 años de cárcel; Rafael Jesús Núñez Echenique, de 18 años y con una pena de 12 años de cárcel, y Brian Piloto Pupo y Giuseppe Belaunzarán Guada, ambos de 16 años de edad y condenados a 10 años de prisión.
Varios de los menores tenían solo 17 años en el momento de los hechos, y cumplieron los 18 en prisión.
Las autoridades alegan que los manifestantes son culpables de “cometer y provocar graves disturbios y hechos vandálicos, con el propósito de desestabilizar el orden público, la seguridad colectiva y la tranquilidad ciudadana”.
Familiares aseguran que los menores solo ejercieron su derecho a manifestarse libremente en contra del gobierno.
La organización defensora de los derechos humanos Amnistía Internacional ha pedido a las autoridades cubanas que permitan entrar en al país a sus representantes, y otros observadores internacionales, para dar seguimiento a los juicios en curso contra los manifestantes del 11 de julio.