Yanaisy Curbelo, madre del preso político Brandon David Becerra Curbelo, encarcelado por manifestarse en La Habana el 11 de julio, fue detenida este jueves.
En conversación con Radio Martí, Curbelo explicó que durante el arresto los agentes policiales accedieron a su teléfono celular y se hicieron pasar por ella y conversaron con personas registradas en sus contactos.
La madre del reo de 18 años de edad, actualmente condenado a 13 años de cárcel, dijo que fue detenida al salir de una tienda donde compró seis refrescos, “ni diez, ni quince pomos”, señaló, para llevarle al menor en su próxima visita a la Prisión Jóvenes de Occidente.
“Como no guardé el comprobante, no lo guardé, lo boté […] pues nada, de rutina, me llevaron para la unidad, que si ‘lo había comprado a sobreprecio’, pues, nada, les expliqué que lo compré en la tienda. Nada, la rutina de ellos”, afirmó Curbelo.
“Ya estoy en la casa, estoy bien. Ahora yo estoy mirando aquí el teléfono, Messenger, ¡y hablaron con la gente!, como si fuera yo, preguntándoles, o sea, a ver qué podían sacarle. ¡Menos mal que, es lógico, se dieron cuenta de que no era yo”, exclamó la mujer.
“Hablaron con la mitad del Messenger que tengo aquí, parece que revisaron todo el teléfono”, concluyó asombrada.
Cada vez es mayor el número de familiares de manifestantes del 11 de julio que han denunciado estar sometidos a detenciones, acoso y a una constante vigilancia por parte de la policía del régimen por exigir la libertad de sus seres queridos, la mayoría encarcelados desde las protestas.
Entre ellos, destaca el caso de Yudinela Castro, madre del menor Rowland Castillo Castro, quien permaneciera detenida en Villa Marista, sede de la policía política del régimen, por más de 15 días y se encuentra bajo amenaza de ser condenada con “30 ó 40 años de prisión”.
El permanente asedio a la familia del joven Andy García Lorenzo, manifestante de la ciudad de Santa Clara, ha sido noticia durante semanas en los medios de comunicación independientes. El acoso a los García Lorenzo llegó incluso a la agresión física, cuando recientemente el padre de Andy fue apuñalado por la espalda en pleno día. Los García Lorenzo han padecido desde huevos podridos lanzados a su lugar de trabajo, hasta persecuciones en las calles y amenazas de todo tipo.
Bárbara Farrat, madre de Jonathan Torres Farrat, también menor de edad y María Celia Aguilera, madre de Luis Armando Cruz Aguilera, son otras de las víctimas de vigilancia, persecuciones, amenazas y detenciones del régimen.
A estos nombres se pueden sumar, entre otros muchos, el de Disney Azahares, hermana del preso político Dixán Gaínza, cuyo hogar permanece bajo vigilancia policial las 24 horas.