Las afectaciones por la disminución de la producción de frijoles en Cuba alcanza la canasta básica, y en la calle el precio de una libra del grano puede llegar a los 20 pesos en moneda nacional... cuando aparece.
Campesinos entrevistados por Radio Martí en tres de las principales zonas cosechadoras de frijol en la isla explican las razones que han provocado esta situación.
Desde la provincia de Holguín, donde se ubica Velasco, reconocido en otras épocas como el Granero de Cuba, situado en el municipio de Gibara, en el sur del territorio, el experto en temas agrícolas Osmel Ramírez Álvarez comenta que allí el precio del frijol oscila entre 18 y 22 pesos.
Según Ramírez Álvarez, la falta de liquidez en el país provocó que no llegaran a los campesinos los insumos necesarios para la cosecha del grano.
En otra importante zona frijolera, Quemado de Güines, en Villa Clara, el productor Ibar González informa que desde el mes de septiembre las cosas comenzaron mal, y este es el resultado.
El frijol es más importante para la dieta del cubano que el arroz, opina el campesino, a quien los inspectores del Ministerio de la Agricultura le acaban de suspender el permiso de usufructo de dos caballerías de tierras dedicadas a la siembra del grano. La medida, ha denunciado González, es una represalia por sus declaraciones por criticar la falta de atención a los campesinos por parte de las instituciones del gobierno.
En Los Cristales, Jatibonico, otra gran zona productora, sumado a la ineficiencia del Estado, llovió mucho en septiembre, y las aguas dañaron los sembrados, reporta Vladimir Ríos Cruz, que trabaja allí en una UBPC.
La producción de frijol disminuyó en la actual campaña un 50% con respecto al año anterior, y el país tendrá que invertir cerca de 50 millones de dólares en importaciones de granos para cubrir este déficit, dijo en entrevista con el diario Granma, Yojan García Rodas, Jefe del Departamento de Cultivos Varios del Ministerio de la Agricultura.