La Marcha Cívica por el Cambio, convocada en Cuba por la plataforma Archipiélago para el próximo 15 de noviembre, tendrá réplicas en al menos 42 ciudades en todo el mundo, según han anunciado en redes sociales distintas agrupaciones de exiliados cubanos y simpatizantes con la causa de la democratización de la isla.
La plataforma Archipiélago, encabezada por el dramaturgo Yunior García y otras organizaciones de la sociedad civil cubana como el Consejo para la Transición Democrática en Cuba, el grupo de artistas e intelectuales 27N y el Movimiento San Isidro han manifestado que saldrán a las calles por la libertad de los presos políticos, en especial los del 11J, el fin de la violencia, el respeto a los derechos de todos los cubanos y para encontrar solución a los problemas por vías democráticas y pacíficas.
Las amenazas del gobernante Miguel Díaz-Canel incitando, tal como hizo el 11 de julio a las masas a enfrentarse a los manifestantes con lo que tengan a mano y las fotos que circulan en las redes sociales que muestran a sus seguidores con palos y fusiles, no han logrado desanimar a los organizadores y la respuesta de los cubanos de “ultramar” no se ha hecho esperar.
Barcelona, Londres, Washington D.C., Lisboa, Santiago de Chile, Buenos Aires y Montevideo son algunas de estas 42 ciudades que, hasta el día 25 había confirmado su participación. En varias, las marchas está pensado realizarse los días 13, 14 y 15 de noviembre y otras mantienen la fecha original del 20N.
La activista Daniela Rojo, una de las promotoras, ha propuesto que, quienes decidan incorporarse a la Marcha Cívica por el Cambio, tanto en Cuba como en otras partes del mundo, lo hagan vestidos de blanco como símbolo visible del propósito fundamental de la convocatoria a la No-Violencia y que el régimen ha ordenado atacar con las "Brigadas de Violencia Rápida", como la sociedad ha rebautizado a los paramilitares de las llamadas Brigadas de Respuesta Rápida.
La idea original de convocar la marcha para el 20 de noviembre tuvo que alterarse cuando el régimen respondió anunciando maniobras militares del 18 al 20 por el Día de la Defensa.
Luego al adoptarse el 15N, el régimen declaró ilegal la marcha; ha comenzado a detener, amenazar y cortar las comunicaciones a los organizadores en la isla y la Fiscalía Nacional les advirtió que de persistir en marchar serían procesados por varios delitos.
Varios organizaciones internacionales han alertado sobre la vulnerabilidad de los ciudadanos que decidan salir a las calles ese día y gobiernos como el de Estados Unidos y España han instado al régimen de Cuba a respetar el derecho a la manifestación.