El sacerdote católico Kenny Fernández Delgado bendijo este sábado a los cubanos que se han lanzado a la calle en diferentes localidades del país para protestar por la difícil situación que atraviesan, en medio de un apagón generalizado, escasez de alimentos, agua y cortes de internet.
"Saludos a todos los manifestantes, a todos los que están exigiendo sus derechos en las calles, sus justos reclamos de luz, agua, comida, libertad", dijo el padre Kenny en un breve mensaje en video publicado en sus redes sociales.
En un nuevo estallido social, los cubanos salieron a las calles a sonar cazuelas y exigir a sus gobernantes mejores condiciones de vida, tras el paso por el occidente de la isla del huracán Ian y el consecuente apagón nacional de varios días que el gobierno atribuye a un colapso de su sistema energético debido al fenómeno meteorológico.
El padre Kenny envió, desde Madruga, Mayabeque, "una bendición especial para los manifestantes de Mantilla, mi tierra natal", y también para los de Barreras, "donde estuve sirviendo como sacerdote durante 9 meses".
"Mi oración por todos ustedes y la bendición de Dios. ¡Qué Dios los bendiga, en nombre del padre, el hijo y el espíritu santo, y les dé mucha fuerza! Ojalá pudiera estar allí con ustedes ahora", expresó el religioso, conocido por sus señalamientos críticos al gobierno liderado por Miguel Díaz-Canel.
En un tuit publicado este sábado, el sacerdote denunció los apagones de internet con los que el gobierno busca controlar la difusión de información sobre las protestas.
"Los cortes de Internet son un arma de doble filo porque afectan a muchísimas personas, causando molestia; suele ser un indicador de que hay protestas y, sobre todo, porque el gobierno comunista pierde mucho dinero cuando hace esos cortes", afirmó.
El religioso dijo, además, que la situación que enfrentan los cubanos no se resolverá con ayuda del exterior.
"Nadie espere ayuda de la ONU, de EEUU, de la Unión Europea, ni de cualquier otro país u organización. Ellos NO son los que están sufriendo los apagones, el hambre, la escasez de todo y, en especial, de libertad. Esta situación nos DUELE a nosotros y la resolvemos nosotros", concluyó.
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