Un grupo bipartidista en el Congreso de Estados Unidos presentó una resolución este jueves para pedir a la administración del presidente Joe Biden que retire las visas a funcionarios de terceros países que estén involucrados en la contratación de brigadas médicas del régimen cubano.
El texto presentado por el presidente del Comité de Seguridad Nacional de la Cámara, Mark Green (republicano por Tennessee) se basa en el informe sobre la Trata de Personas del Departamento de Estado de junio, donde EEUU critica nuevamente la exportación de médicos cubanos como una forma de trata.
“Cuba ha sido un cuento de advertencia contra el comunismo durante más de setenta años. Desde el patrocinio estatal del terrorismo hasta graves violaciones de los derechos humanos, los regímenes de Castro y Díaz-Canel representan todo a lo que Estados Unidos debería oponerse”, dijo Green a The Hill, el primer medio en reportar sobre la resolución.
“Nuestra resolución es un llamado al Congreso para condenar la trata de personal médico por parte del régimen y responsabilizar a la Organización Panamericana de la Salud (OPS) por utilizar millones de dólares de los contribuyentes estadounidenses para promover esta operación de trata de personas”, agregó.
Un grupo de médicos cubanos ha demandado a la OPS por su implicación en un esquema que facilitó recursos al régimen cubano mediante la exportación de miles de médicos a Brasil durante el mandato de Dilma Rousseff.
Decenas de miles de profesionales cubanos prestan servicios en varios países. Más del 75% de sus salarios es retenido por el gobierno de Cuba.
Cifras oficiales del régimen cubano reconocen que la exportación de servicios médicos constituye una de las principales fuentes de ingresos de la economía cubana, generando más de $11,000 millones en la última década.
Las misiones médicas cubanas han sido objeto de controversia en América Latina. Un reportaje de The New York Times reveló que en Venezuela, la asistencia médica se utilizaba para ganar apoyo electoral para el chavismo.
Bolivia y Ecuador cancelaron sus contratos con Cuba tras varios incidentes, mientras que el presidente brasileño Jair Bolsonaro puso fin al acuerdo, calificándolo de "esclavitud moderna".
Cuba negocia con otros países el pago por sus médicos, quienes solo reciben una pequeña parte de esos fondos. Además, el dinero se mantiene retenido en bancos cubanos para asegurar que los médicos cumplan los tres años de contrato. Si alguno escapa de la misión, el gobierno se queda con esos fondos.
El régimen cubano, por su parte, niega las alegaciones de trata de personas y asegura que los médicos resuelven problemas de salud en países pobres.
“El objetivo del régimen cubano no es el altruismo, sino el lucro. Los médicos cubanos reciben solo una pequeña parte de sus ganancias, y solo cuando regresan a Cuba. Es hora de dar a los trabajadores de la salud cubanos la dignidad y el respeto que merecen. Una forma de hacerlo es revocar la autoridad de visado para los funcionarios de organizaciones extranjeras que participan en la trata de personal médico por parte de Cuba. Esta resolución insta al presidente Joe Biden a hacer precisamente eso”, afirmó Green.
La propuesta pide a la Administración de Biden revocar las visas de funcionarios de la OPS y de Brasil, México y Honduras, países que han mantenido relaciones con Cuba como un símbolo de independencia de Estados Unidos.
Entre esos funcionarios podría estar Claudia Sheinbaum, la presidenta electa de México, quien asumirá el cargo el 1 de octubre y que, en su tiempo como alcaldesa de Ciudad de México, contrató abiertamente los servicios de las brigadas médicas cubanas.
"Las Misiones Médicas Cubanas son una forma de trata de personas y esclavitud moderna. Líderes socialistas, como Xiomara Castro en Honduras, que se benefician de la explotación de médicos cubanos, deben asumir las consecuencias", afirmó la congresista María Elvira Salazar, republicana de la Florida y copatrocinadora de la resolución.
Otros representantes floridanos como el republicano Carlos Giménez y el demócrata Jared Moskowitz también apoyaron la iniciativa.
Para el régimen cubano, la propuesta bipartidista busca "denigrar la labor altruista, solidaria e internacionalista de las Brigadas Médicas" cubanas.
El Ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez, dijo que en iniciativas como esta se "utilizan pretextos falsos y mienten para continuar aumentando la presión y cerco económico" contra el pueblo cubano.
Foro