Después de la llegada de cientos de migrantes cubanos a Uruguay el procurador general de ese país, Jorge Díaz, confirmó que hay al menos dos investigaciones en curso por eventual tráfico y/o trata de personas
El funcionario corroboró que una de esas indagatorias ─destapada hace dos días por el sitio de noticias Subrayado, y que estaría relacionada con los recientes arribos de isleños─ se instruye en la ciudad de Río Branco, situada en el este del departamento de Cerro Largo y fronteriza con el estado brasileño de Rio Grande do Sul.
Díaz evitó dar detalles de las pesquisas, pero recordó que los delitos de tráfico y trata de personas están tipificados en el ordenamiento jurídico uruguayo desde la aprobación de la ley 18.250 de Migraciones.
El jurista diferenció el delito de tráfico, en el que se vulneran las leyes migratorias, de la trata de personas, que implica explotación y es considerado de lesa humanidad.
Subrayado reportó el miércoles que en los últimos días de 2017 y en las primeras jornadas de 2018 decenas de cubanos pidieron asilo en Río Branco, presuntamente después de pagar hasta 5.000 dólares por cabeza a un sospechoso ya identificado para que les ayudara a ingresar al país por la frontera de Cerro Largo.
Llamó la atención de las autoridades que en todos los casos se vio a una persona cerca de los cubanos, y por allí se inició la investigación.
El año pasado un ciudadano cubano de 75 años de edad fue enviado a prisión por tráfico de personas.
En un informe emitido la semana pasada, Subrayado daba cuenta de que en el 2017 habían ingresado al país 4.577 cubanos, y que la gran mayoría de estos arribos se registraron con las autoridades entre octubre y diciembre.
Por su parte el diario local El País señala que según datos oficiales más de la mitad de los cubanos que llegan a Uruguay no lo hacen por el aeropuerto internacional de Carrasco en Montevideo. Precisa que en los últimos dos años 1.820 entraron al país por Rivera y 686 por Chuy, ciudades que comparten calles respectivamente con la localidad brasileña de Santana do Livramento y la homónima de Chuy.
En esos últimos tres meses del año pasado la ciudad de Santa Rosa, en el departamento de Canelones y a unos 50 kilómetros de Montevideo, recibió a más de 220 cubanos que eligieron ese lugar para residir y trabajar. La cifra representa un 5% de los habitantes de la localidad.