Lester Fernández Elizástigui, hermano del preso político Luis Robles Elizástigui, fue trasladado el miércoles desde la unidad policial de La Picota, en La Habana, hacia la cárcel de Valle Grande, también ubicada en capital cubana.
“Lester, en el día de ayer, fue trasladado para Valle Grande. Se le contrató un abogado, el cual nos dio a conocer que presentó un cambio de medida a Fiscalía y, nada, esperar, es lo que nos toca”, dijo este jueves Yindra Elizástigui, madre de ambos jóvenes, a Martí Noticias.
Según explicó, el abogado le dijo que el proceso de respuesta por parte de la Fiscalía demora “entre 15 y 20 días”.
Elizástigui opina lo que ha sucedido con sus hijos “es un abuso".
"Llega el momento en que uno se siente impotente ante tanta injusticia. Ahora mismo, mira a mi hijo, está enfrentando una acusación de atentado ¿Atentado contra qué, si el que le dio el golpe fue el policía? Y claro que él tiene que reaccionar y responder”, aseguró.
“Alguien tiene que pensar con la cabeza fría. Un pueblo que está totalmente sumergido en la miseria, ¿tiene que también permitir que lo avasallen, que lo maltraten más de lo que estamos siendo maltratados?", manifestó la mujer.
Lester Fernández Elizástigui, de 21 años, fue detenido tras un altercado con un policía, el 20 de julio, durante su fiesta de cumpleaños. En abuso de su poder, sin que mediara provocación alguna, el agente golpeó al joven tras ordenar que quitaran la música, según ha denunciado la familia.
Robles sigue a la espera de la libertad condicional
Respecto al caso de su otro hijo, Luis Robles Elizástigui, la mujer explicó que siguen a la espera de una respuesta sobre la solicitud del beneficio de libertad condicional.
"Ya me explicaron, no lo sabía, que esta solicitud también la hace el centro penitenciario donde se encuentra, en este caso, allí, en el campamento de La Lima y, esperar a ver qué pasa, porque esto está acabando conmigo”, lamentó.
Robles Elizástigui, de 32 años, cumple cinco años de privación de libertad por manifestarse pacíficamente en diciembre de 2020 en la céntrica calle conocida como Boulevard de San Rafael, en Centro Habana, pidiendo libertad y el fin de la represión.
Tras la detención de su segundo hijo, la madre de los dos prisioneros políticos se declaró en huelga de hambre frente a la estación de policía de la calle Dragones, en La Habana, donde se encontraba encerrado su hijo Lester.
No era la primera vez que los agentes del orden arremetían contra el menor de sus hijos, ya que en 2023 fue arrestado y acusado de intento de salida ilegal, dijo entonces Yindra Elizástigui.
(Con reporte de Ivette Pacheco para Martí Noticias)
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