Libertad para las producciones agrícolas sin interferencia del Estado, ese el único camino para incrementar la producción de alimentos en Cuba, dijeron campesinos cubanos entrevistados por Radio Martí sobre la propuesta del primer ministro Manuel Marrero para solucionar los problemas de desabastecimiento del sector.
Desde Mayarí, en Holguín, el biólogo y experto en temas agrícolas Osmel Ramírez Álvarez afirma que el sistema no funciona.
"La agricultura cubana ha fracasado (...). Cuba sigue siendo un país con muchas tierras fértiles e improductivas y no hayan qué inventar para no decir que no funciona el sistema. Los especialistas saben lo que hay que hacer", recalcó.
Sobre la propuesta del primer ministro, Ramírez Álvarez opinó que "parece más una iniciativa política" que económica.
En Quemado de Güines, Villa Clara, el campesino Ibar González manifestó que las políticas del gobierno cubano hacia el hombre del campo en los últimos 61 años ha provocado esta situación.
"Hace falta en Cuba una tercera reforma agraria, pero con justicia. No mirar a las personas por su ideología, por su religión", señaló.
El también agricultor Emiliano González, en Bayamo, Granma, coincidió en que la única vía para revertir este problema de la falta de alimentos es la entrega de las tierras a los campesinos. Actualmente más del 65% de las tierras en Cuba se encuentra en manos del Estado.
"Eso me huele al café caturra, a los 10 millones de la caña, al plan de la moringa... Libertad económica y libertad para producir sin interferencia del Estado, esa es la solución", dijo González.
El trabajador agrícola de la UPBC Los Cristales, en el municipio de Jatibonico, en Sancti Spíritus, Vladimir Ríos Cruz, señaló que la revolución acabó con las más importantes industrias agrícolas en esa región de Cuba. Arrojo Blanco, donde nació, era una zona productora de leche, la segunda del país después de Camagüey.
"Imagina el potencial pecuario que había allí. Llegó [Guillermo] García Frías con la historia esta de [la Empresa Nacional] Flora y Fauna y ha destruido Arrojo Blanco", afirmó Ríos Cruz.
La delegada de la Federación latinoamericana de Mujeres Rurales en Camagüey, Leydis Tabares, tenía una hectárea de tierras en el Kilómetro 15 y medio de la carretera de Vertientes, donde producía viandas, y tuvo que venderla por las presiones de acopio. Allí ahora solo hay marabú.
"Aquí no pueden contar con nada de producción porque aquí no hay nada. Aquí lo que hay es mucho marabú. Si el marabú se comiera fuera una bendición", dijo con ironía.
El domingo, en reunión de balance del Programa de la Agricultura Urbana, Suburbana y Familia, el primer ministro de Cuba, Manuel Marrero Cruz, presentó un plan que propone que por cada habitante de la isla se destinen 10 metros cuadrados a la producción de alimentos en cultivos y cría de animales, según informó la prensa estatal.