Los representantes estadounidenses Mario Díaz-Balart, Michael McCaul, Mark Green, María Elvira Salazar y Carlos Giménez, junto con los senadores James Risch, Marco Rubio, Ted Cruz, Rick Scott y Bill Cassidy, emitieron este jueves una declaración crítica sobre el reciente anuncio de la administración Biden que otorga “concesiones a la brutal dictadura cubana”.
Los congresistas dicen en la declaración que durante las históricas protestas contra el régimen de Cuba el año pasado, el presidente Biden expresó que "Estados Unidos apoya a los valientes cubanos que han salido a las calles para oponerse a 62 años de represión bajo un régimen comunista", pero que sin embargo, "hoy, mientras cientos de activistas permanecen encarcelados ilegalmente, la Casa Blanca está resucitando la política fallida del presidente Obama de concesiones unilaterales a la dictadura criminal de Castro/Díaz-Canel”.
La Casa Blanca anunció una serie de medidas el 16 de mayo, como por ejemplo aumentar las remesas y los viajes a Cuba, y reanudar el programa de reunificación familiar. Son acciones tomadas para defender los derechos humanos del pueblo cubano, precisaron representantes de la administración Biden.
También se incrementará el apoyo a emprendedores cubanos independientes y se ampliará el acceso de los emprendedores a las microfinanzas y la capacitación, sin hacer cambio alguno a la lista de entidades cubanas sancionadas por el gobierno estadounidense, indicó la Casa Blanca.
No obstante, los firmantes de la declaración argumentan que en lugar de apoyar las súplicas de los cubanos por la libertad mediante la expansión de la “programación de la democracia, la radiodifusión, la diplomacia global y las sanciones contra sus opresores, la Casa Blanca de Biden está recompensando a la dictadura comunista más longeva del hemisferio occidental con conversaciones de alto nivel, alivio de las sanciones, aumento de los viajes y acceso a las instituciones financieras de los Estados Unidos”.
Opinan los representantes y senadores que apaciguar al “régimen asesino de Cuba no cumple con los requisitos legales de la ley estadounidense y socava el apoyo de Estados Unidos a la oposición democrática de Cuba”.
Concluyen los congresistas afirmando que el “repetido apaciguamiento de la Administración Biden a la dictadura cubana es una traición al compromiso de Estados Unidos con los derechos humanos y la libertad, y con el sufrido pueblo cubano que lucha por una verdadera transición democrática".
En medio de los cambios en la política hacia Cuba, el Departamento de Estado anunció el 20 de mayo que mantendrá a Cuba en la lista de países que no cooperan totalmente con los esfuerzos antiterroristas de Estados Unidos.
Debido a esa decisión, se prohíbe la venta o licencia para la exportación de artículos y servicios de defensa a Cuba y se notifica a la comunidad internacional que Cuba no está cooperando completamente con los esfuerzos antiterroristas de los Estados Unidos.