El régimen cubano, que desde el inicio de la pandemia se negó a beneficiar a la población del mecanismo COVAX, que ya ha distribuido 95 millones de dosis a 134 países desde finales de febrero, acaba de echar por tierra el ofrecimiento de exiliados y grupos de la sociedad civil de activar un corredor humanitario para llevar a la isla insumos médicos, medicinas y alimentos.
La negativa del gobierno a recibir la ayuda humanitaria en momentos en que Cuba es el país de la región del Caribe con peor situación epidemiológica, se dio a conocer en declaraciones de los principales voceros de la prensa oficialista cubana: la Directora de Política informativa del Instituto Cubano de Radio y Televisión, Bárbara Betancourt y la periodista oficialista Arleen Rodríguez Derivet, directora de la "Mesa redonda" de la TV cubana.
El jueves en el programa "Chapeando bajito" de Radio Rebelde dijeron que el ofrecimiento se ampara en supuestos motivos humanitarios para hacer agresiones humanitarias y luego "intervenciones militares".
Betancourt dijo que ante el "discurso humanitario no puedo más que reírme" pues a su juicio, no es más que un pretexto para entrar al país productos de aseo y revenderlos.
"Algunos de nosotros hemos tenido que salir a la calle a buscar muchos de esos artículos (...) y se ha visto a cómo los venden esas personas que los van a traer por razones humanitarias. (...) Todas esas cosas que están reclamando que también entren de manera humanitaria no sirven más que para hacer negocios en el país. Así que no digan más que son por razones humanitarias", declaró.
Rodríguez Derivet consideró la iniciativa #SOSMatanzas #SOSCuba como una campaña de ataque contra el sistema que ella representa y el pedido de los ciudadanos de que los médicos que Cuba envía a misiones en el extranjero asistan en las zonas más afectadas por la pandemia como un ardid de esta campaña.
El periodista oficialista Reinier Duardo dijo que los usuarios que han hecho el llamado con las etiquetas #SOSMatanzas y #SOSCuba son delincuentes que intentan "desconocer al Gobierno cubano" y propiciar una intervención extranjera.
"Hemos vuelto al punto de máximo ataque al país. La eficacia de nuestras vacunas y la respuesta que está dando Cuba con innovación a problemas que otros países ni mencionan, como la crisis con la COVAX que decían que debíamos comprar o la elaboración de nuestros propios kits de antígenos. No nos perdonan la resistencia creativa", dijo Derivet.
Desde la cúpula gobernante llegan también comentarios laudatorios al Sistema de Salud Público de Cuba que ha quedado expuesto como inoperante por múltiples testimonios desde todas las regiones de Cuba: hospitales y policlínicos colapsados, pacientes en los pasillos, enfermos atendidos en el suelo, personas que mueren por falta de medicamentos, falta de ambulancias y personas con la enfermedad que no reciben atención médica alguna.
El primer ministro Manuel Marrero, sin embargo, afirmó tras un recorrido por varias provincias: "Hemos comprobado la vitalidad del sistema de salud de #VillaClara, #SanctiSpíritus y #Cienfuegos. Tienen la capacidad y condiciones de enfrentar este rebrote de la #COVID19, y controlarlo".
También el gobernante cubano Miguel Díaz-Canel negó que el sistema sanitario del país estuviera colapsado y celebró este viernes en Twitter que "en medio de días muy difíciles, nos llega la gran noticia de la eficacia de #Soberana02 + #SoberanaPlus: 91,2% ¡Qué tremendo impulso para seguir luchando por la vida! Gracias a nuestros científicos por apuntalarnos la esperanza".
El sucesor de Raúl Castro declaró que este viernes el país amanece "con altísimas cifras de nuevos casos y fallecidos por la COVID-19, a las que no estamos acostumbrados ni nos acostumbraremos".