Activistas de derechos humanos en la isla han continuado denunciado a Radio Televisión Martí las arbitrariedades de que son víctimas en medio de la pandemia por el coronavirus.
Yoel Parson, activista de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), afirmó que uno de esos ciudadanos multado esta semana le pidió que divulgara su caso.
Se trata de Onay Medina Martínez, un taxista que durante un trayecto en que no tenía pasajeros se detuvo para comer y "como es lógico se descubrió la boca. Cuando un policía lo vio, lo multó con 500 pesos", según el Decreto Ley 272, relató Parsons.
Explicó que el chofer trató de convencer al policía, "pero me dijo que ante la negativa no protestó más porque si insistes en dar una versión diferente a la de las autoridades te imponen multas por desacato".
Parsons fue detenido la semana pasada y declaró que en los calabozos conoció varias personas que estaban allí por "mal uso del nasobuco (mascarilla)".
Carlos Alvarez Rojas, activista de la UNPACU residente en La Habana, fue arrestado este jueves por llevar un pañuelo, a manera de mascarilla, para protegerse mientras esperaba para comprar alimentos.
"Me llevaron para la Estación de Policía de Zanja (en La Habana) y me pusieron una multa de 150 pesos porque dicen que no puedo usar un pañuelo", relató.
El activista criticó que el régimen no facilita las mascarillas y señaló que no todos tienen dinero comprar las que se consiguen, "a un dólar o 25 pesos".
La Gaceta de Cuba precisó que el Decreto Ley 272 se aplica contra cualquier persona que contravenga las regulaciones de la higiene comunal, y se impondrán las multas y las medidas que para cada caso se establezcan.