El régimen cubano libra “una guerra cultural e ideológica en las redes digitales, para lo cual alista las potencialidades de la creciente informatización”, según dijo un dirigente del Partido Comunista (PCC).
Es un tema estratégico para el PCC que fue debatido en la primera sesión del octavo congreso de ese órgano, este viernes en La Habana, reportó el portal oficialista Cubadebate.
Las sesiones del Congreso se realizan a puerta cerrada para la prensa extranjera e independiente, y solo tienen acceso al evento los principales medios oficialistas del país.
La comisión sobre el funcionamiento y trabajo ideológico en el VIII Congreso del Partido Comunista de Cuba contó con la presencia de José Ramón Machado Ventura, segundo secretario del Comité Central del PCC. Raúl Castro, primer secretario, anunció su renuncia al cargo el viernes, durante la apertura del Congreso.
Es “una batalla en tiempo real”, señaló el jefe del departamento Ideológico del PCC, Víctor Gaute, según Cubadebate.
El régimen controla el acceso a Internet en la isla, e intenta censurar el contenido en las redes sociales con legislaciones que coactan la libertad de expresión, han denunciado organizaciones internacionales de derechos humanos.
Un nuevo decreto-ley, promulgado horas antes de iniciar el congreso comunista, le permitirá regular con mano dura las nuevas tecnologías y la comunicación. La norma jurídica "De las Telecomunicaciones, las Tecnologías de la Información y la Comunicación, y el Uso del Espectro Radioeléctrico", impondrá un marco legal para "contrarrestar las agresiones radioeléctricas y en el ciberespacio”.
El intelectual cubano Miguel Barnet, miembro del Comité Central del Partido y delegado al congreso por La Habana, dijo que los artistas, escritores de la isla reafirman su compromiso con “desmentir las campañas montadas en las redes sociales”.
“Hemos estado siempre al lado de esta gran causa, que no se equivoque el amigo, ni el enemigo. Los escritores y artistas, en su enorme mayoría, hemos apoyado siempre a la Revolución. Que no se confundan las redes sociales, por muy inmensas y eficientes que parezcan ser. La Revolución se lleva en el corazón”, señaló, citado por Cubadebate.
Una creciente ola de protestas sociales sacude a la isla en medio de una crisis política y económica agravada por la pandemia de COVID-19, en la que han sido protagonistas jóvenes artistas, periodistas independientes y activistas de derechos humanos que utilizan las redes sociales para dar a conocer sus demandas y convocar a manifestaciones pacíficas.También para denunciar la represión en su contra.
Entre las caras más visibles se encuentran las de los miembros del Movimiento San Isidro y el 27N, ambos grupos con propuestas de diálogo nacional como alternativa a la “continuidad” y política de partido único del PCC, y quienes permanecen bajo estricta vigilancia policial desde días antes de que comenzara el congreso comunista.