Bajo vigilancia policial, y enfrentando una amenaza real de ser llevados a prisión, hacen su trabajo los periodistas independientes dentro de Cuba, dijo a Radio Martí desde La Habana el colaborador del portal digital CubaNet, Enrique Díaz.
La represión, asegura Díaz, hace cada vez más difícil el trabajo que realiza como comunicador. Recientemente, cuando salió a la calle en busca de opiniones para un reportaje, no hizo más que sacar el teléfono y fue detenido.
"Nos han dado datos, incluso, de que tal día estábamos en tal lugar. Sabemos que estamos monitoreados, y sentimos la presión. Nos sobreponemos, porque es nuestro trabajo, hay que hacerlo, pero sabemos que estamos monitoreados", recalcó.
Según Díaz, los periodistas independientes se hallan actualmente en medio de "un campo de batalla".
"Cada periodista independiente, acá en Cuba, haciendo su labor, está expuesto, primeramente, a altas sanciones, y en segundo lugar, a merced de ellos... porque este es un estado sin derecho", subrayó Díaz, en referencia a la impunidad con la que los órganos de la Seguridad del Estado y otras fuerzas represivas hostigan a los miembros de la sociedad civil.
El reportero señaló que, a su regreso a la isla de un viaje a Suecia, un agente de la Seguridad del Estado le advirtió, decepcionado porque no se quedó en Europa, que "buscara la forma de salir de Cuba" de forma definitiva.
Díaz concluyó que los comunicadores independientes que laboran desde dentro de Cuba corren "un riesgo verdadero" a ser, incluso, encarcelados, bajo legislaciones que criminalizan su labor.
"El riesgo es real", afirmó.
El nuevo Código Penal, que entrará en vigor en diciembre próximo, establece sanciones de uno a tres años de cárcel a "quien difunda noticias falsas" con el propósito de "perturbar la paz internacional o de poner en peligro el prestigio o el crédito del Estado cubano".
En julio pasado, fue presentado un anteproyecto de la Ley de Comunicación Social para regular los contenidos en la prensa, apegado a la Constitución de 2019, que instituye que los medios de comunicación son de propiedad estatal socialista, dejando fuera la posibilidad de la mera existencia de los medios independientes.
Un informe reciente de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) señala que los periodistas independientes, artistas, activistas por los derechos humanos, y todo aquel que ejerce la libertad de expresión y prensa en Cuba, "son víctimas de persecución, acoso, actos intimidatorios, confiscación de equipos de trabajo y represión…, en una clara violación del Artículo 19 de la Declaración Universal de Derechos Humanos”.
En Cuba, los medios de comunicación independientes del oficialismo se han convertido en "una forma de resistencia" frente al embate del gobierno en contra de las libertades de expresión y prensa, ha declarado, por su parte, la directora para América Latina de Amnistía Internacional Erika Guevara-Rosas.
(Con reporte de Ivette Pacheco para Radio Martí)
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