El rapero contestatario Denis Solís fue traslado a un campamento en la zona 0 de la prisión Combinado del Este, en La Habana y, tras varios días de tener prohibido el acceso al teléfono, pudo hablar con la familia y, por primera vez, relatar detalles de su arresto en noviembre pasado.
Su tío, Vladimir González, dijo a Radio Televisión Martí que Solís confirmó que su llamada a Maykel Castillo, El Osorbo, fue la causa de la prohibición del acceso al teléfono.
También le comunicó que fue trasladado al "campamento para donde pasan a los presos que les queda poco tiempo de cárcel, que es un régimen más suave, puede trabajar y les pagan un salario, creo".
En noviembre de 2020, el rapero fue arrestado violentamente en Compostela y Conde, La Habana Vieja, cuando caminaba por la calle.
Fue acusado de desacato y, el día 11 de ese mes, sentenciado por el Tribunal Municipal de La Habana Vieja a ocho meses de privación de libertad, en un juicio sumario.
Luego fue trasladado al Combinado del Este, un centro penitenciario de máxima seguridad en La Habana, y desde entonces ha habido poca comunicación con la familia, que no había tenido acceso a detalles del arresto.
Durante esta última llamada Solís le confirmó a su tío que fue víctima de atropellos durante la detención.
"Fue violento, (el arresto). Tres hombres grandes le dieron una golpiza de tal grado que le doblaron las piernas y los brazos, y dice que se defecó. Así, literalmente, me lo dijo", relató González.
También dijo "que casi lo asfixian, y el corazón le palpitaba fuerte, que fue una experiencia muy mala".
El arresto, recordó González, ocurrió a pleno día, cuando iba a comprar el pan y fue abordado por tres hombres vestidos de civil que se bajaron de un auto con matrícula particular.
"La gente les gritaba que no le dieran y ellos se identificaron que eran del DTI o algo así, y le fueron arriba con toda la violencia, como si el hombre fuera armado... o algo así", precisó.
El rapero fue detenido y acusado de desacato luego de que transmitiera a través de Facebook una directa en la que mostraba el momento en que expulsaba de su vivienda a un agente de la PNR, que irrumpió en la misma sin portar autorización alguna.
Integrantes de Movimiento San Isidro (MSI), del que el músico forma parte, sostienen la inocencia del joven, y alegan que lo procesaron por una denuncia del propio policía que irrumpió en su casa, sin permiso.
El MSI ha dicho que desde días antes del incidente el músico estaba siendo acosado por la Seguridad del Estado con llamadas ofensivas, amenazas, y vigilancia en las esquinas de su vivienda, y creen que el policía que lo acusó fue enviado con el propósito de irritar a Solís.
Su tío recalcó que "simplemente por sus ideas políticas le fueron arriba con toda la violencia".
Organizaciones defensoras de los derechos humanos en el mundo se han pronunciado a favor de la libertad incondicional del artista. Prisoners Defenders lo incluyó en el listado de encarcelados por razones políticas en la isla.
(Con reporte de Ivette Pacheco para Radio Martí)