La madre de un manifestante del 11J que lleva un año y medio encarcelado en un limbo legal, sin petición fiscal y sin juicio, presentó el viernes un Habeas Corpus en el Tribunal Provincial de la Habana, demandando su inmediata liberación.
Se trata de Manuel de Jesús Guillén Esplugas, de 27 años de edad y activista de la organización opositora Unión Patriótica de Cuba (UNPACU).
Guillén Esplugas, residente en el municipio de La Habana Vieja, fue detenido violentamente en su domicilio, el 17 de julio de 2021, por agentes de la Seguridad del Estado, por filmar y publicar en redes sociales videos de las protestas populares del 11J, mientras él participaba, dijo a Radio Televisión Martí su madre, Dania María Esplugas Falcó.
“Lo presente porque está preso injustamente hace un año y seis meses, y no le han imputado delito alguno, y sin juicio. Él fue detenido, presuntamente, porque estar subiendo para las redes todo lo que estaba haciendo el gobierno durante las protestas. Ya arrestado, le rompieron hasta el teléfono, y así me lo entregó luego la policía política”, detalló la mujer.
Inicialmente, Guillén Esplugas fue conducido para la 4ta. Unidad de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR), ubicada en Zanja y Chacón, municipio Centro Habana. Desde allí lo trasladaron para el cuartel de la policía política, y luego para el penal Combinado del Este, donde se encuentra actualmente.
El joven estuvo un mes aislado en la sede de la Seguridad del Estado, conocida como Villa Marista, donde fue maltratado físicamente porque querían que se retractara, aseguró Esplugas Falcó.
“Él les dijo que sus ideas nadie se las cambiaba, y exclamó ¡Patria y Vida! A este gobierno no le gusta que le digan Patria y Vida. Allí lo tuvieron incomunicado, no supe nada de mi hijo en ningún momento. Allí le dieron golpes y cuando el 1ro de septiembre de 2021 fue trasladado para el Combinado, estaba aún inflamado. Hoy está recluido en el edificio tres, en el cuarto piso sur, compañía 3402”, indicó la madre del preso político.
Añadió que no pudo verlo hasta octubre, porque aún tenía las marcas de la golpiza que le habían propinado.
“Luego que lo sacaron de un lugar llamado El Depósito, el día de la primera visita, mi hijo me confirmó todo lo que ocurrió en Villa Marista, me dijo: ‘Mami, yo vine para el Combinado y todavía estaba con muestras visibles del abuso físico, por la mano de golpes que me dieron’”.
Según Esplugas Falcó, producto de esa golpiza, se le infamaron algunas glándulas en la parte inferior de los oídos, y fue operado en el hospital de la prisión “tras mucha insistencia mía”, denunció.
Este es el segundo recurso de Habeas Corpus que los familiares presentan a favor del detenido. El 25 de enero había sido entregado el Auto No. 1 ante la sala de la Seguridad del Estado del Tribunal Supremo de Justicia, que desestimó la petición una semana después.
Sobre las violaciones jurídicas en el caso de Guillén Esplugas, se pronunció también el Centro de Derechos Humanos, con sede en La Habana, explicó a Radio Martí su coordinadora Martha Beatriz Roque Cabello.
“Una de las cosas que más afecta a los presos del 11J es que no se cumple con la propia legalidad socialista. Por ejemplo, el caso de Guillén: está preso desde julio de 2021, no se ha celebrado juicio, tampoco tiene petición fiscal, no tiene nada”, concluyó Roque Cabello.
Foro