La profesora y activista Omara Ruiz Urquiola expresó este viernes su preocupación por el estado de salud de Luis Manuel Otero Alcántara, tras una segunda detención por negarse a permanecer en otro sitio que no sea su vivienda, allanada anoche de forma violenta por la policía.
Horas después de estas declaraciones, el Movimiento San Isidro (MSI) dijo en Twitter en Otero Alcántara seguía en huelga de hambre y que estaba hospitalizado.
En el video transmitido en vivo por Facebook, antes la mencionada declaración del MSI, Ruiz Urquiola dijo que teme por la vida de Otero Alcántara, quien permaneció durante varios días en huelga de hambre y sed, en protesta por el encarcelamiento del músico Denis Solís.
"Estoy muy preocupada por Luisma. Quiero hacerle saber al mundo que Luis Manuel Otero Alcántara no consiente ningún tipo de asistencia médica en una institución cubana de salud. Así lo ha hecho explícito. Tengo miedo", afirmó.
Según Ruiz Urquiola, los integrantes de San Isidro establecieron un protocolo para la huelga de hambre previendo la escalada de violencia de la dictadura cubana.
"Sabíamos que todo acababa con la patada en la puerta. Dieron la patada en la puerta, y temo por la vida de Luisma. Temo por la salud de Luisma", señaló.
La activista explicó que Otero Alcántara "está débil" y ha bajado de peso tras un prolongado ayuno de alimentos y agua.
"Luisma no tiene por qué ir a casa de nadie. Él es propietario legal de su vivienda", añadió Ruiz Urquiola. El líder del Movimiento San Isidro reside en la vivienda que sirve de sede a ese grupo, en la calle Damas 955, en La Habana Vieja.
Sobre el desalojo de los activistas que permanecían en el inmueble en la noche del jueves, Ruiz Urquiola señaló que "entraron con violencia, de forma ilegal, personas disfrazadas con indumentaria del personal de Salud Pública", y una vez en la unidad policial de Cuba y Chacón "se despojaron de toda esta indumentaria y la echaron en un saco verde. Ni siquiera supieron disimular".
Ruiz Urquiola agradeció la solidaridad internacional con el MSI, y dijo que cuanquier manera de disidencia contra la dictadura en la isla es bienvenida. "Ya el mundo sabe que no los queremos", dijo en referencia al gobierno cubano.