El opositor Ismael Boris Reñí estaría enfrentando su cuarta condena por motivos políticos, según explicó en entrevista concedida desde la unidad policial al activista de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) Zaqueo Báez Guerrero.
El activista está detenido desde el pasado 28 de abril en la unidad policial de Santiago de las Vegas, en el municipio Boyeros, en la capital cubana.
“Estoy aquí en Santiago de Las Vegas (…) me acusan de desacato, por un registro que hicieron en la casa y al final no encontraron nada. Eso es una violación que están haciendo ellos, imagínate, y el guardia (oficial de la Seguridad del Estado, según explicó luego) dice que me va a decomisar el teléfono”, dijo Boris Reñí el viernes en una entrevista que Báez a subido a YouTube.
Luego de la comunicación telefónica Boris Reñí recibió la visita de su esposa, Aimara Nieto Muñoz, quien le pudo entregar productos de aseo personal, pero no pantalones cortos. Cuando regresó a su casa por las prendas de vestir, le informaron que ya Ismael Boris no estaba en esa unidad sino en la prisión de Valle Grande.
Este lunes Zaqueo Báez ofreció una entrevista al programa Contacto Cuba, de Radio Martí y añadió otros detalles: “automáticamente llamamos a la prisión de Valle Grande y nos informaron que él ahí no se encontraba, por lo tanto lo declaramos por desaparecido”.
Al caso de Boris se suma el de su esposa Aimara, que según testimonio de la dama de blanco Micaela Roll Gibert, "fue golpeada salvajemente" el pasado domingo 6 de mayo cuando intentaba marchar por los derechos humanos en la isla y ambas fueron conducidas a la unidad de Calabazar.
"Salimos con carteles a la calle pidiendo por la libertad de los presos políticos y la libertad del pueblo de Cuba, donde fuimos agredidas violentamente, golpeadas, arrastradas, me sacaron dos dientes, me dejaron la cara hinchada. A Aimara le dieron una galleta por la cara brutalmente, le hicieron técnica de estrangulamiento", señaló la mujer.
Roll Gibert agregó que las las tuvieron "dos horas bajo el sol, ofendiéndonos, diciéndonos mercenarias. Amenzaron a Aimara que se la llevaban presa por atentado, cosa que no es cierto, al contrario, ella no hizo nada. La guardia le tenía el pelo aguantado".
Báez Guerrero, quien es el coordinador de UNPACU en La Habana, señaló Boris Reñí se enfrenta a su cuarta condena por motivos políticos: "Estuvo en el Movimiento Andrei Sajárov, fue a prisión por dos años; también cuando (la visita de) el Papa estuvo 50 días en la unidad de 100 y Aldabó y la tercera vez estuvo desde julio de 2016 hasta julio de 2017 en prisión, injustamente, por repartir impresos, discos en las calles informando a la población, que está muy desinformada".
Según datos de UNPACU , la organización dirigida por el exprisionero político José Daniel Ferrer, más de medio centrenar de activistas del grupo permanecen en prisión, sancionados o en espera de juicio, que en ocasiones tardan un año para efectuarse.