Lucinda González, esposa del preso político Silverio Portal Contreras, presentó este miércoles un recurso en el Tribunal Provincial de la Habana donde se solicita nuevamente la libertad condicional para el activista de Cuba Independiente y Democrática (CID), quien ya cumplió dos tercios de su condena y le compete ese derecho, según establece el Código Penal.
“Allí estaba la Seguridad del Estado, y me extrañó que no hubo resistencia, no hubo negatividad de ningún tipo, todo fue muy bien en el tribunal. Me dijeron que tenían respuesta en 60 días hábiles, pero eso es absurdo. Cuántos reclamos hemos entregado legalmente y todavía no he tenido respuesta alguna”, dijo la González en entrevista con Radio Televisión Martí.
La documentación presentada fue asesorada por el abogado independiente Edilio Hernández. La esposa del activista en prisión denuncia que al salir del tribunal la esperaba un mayor de la Seguridad del Estado.
“Cuando yo bajé nos tiramos una foto y Edilio se fue. Yo regresé a esperar mi transporte para regresar a casa y vino el mayor Seúl. Tuvimos un careo y me amenazó. [Dijo] que Silverio, con la conducta que yo estaba tomando, y que él propiamente tomaba dentro de la prisión, por eso no lo iban a soltar, que Silverio no estaba en la calle por lo indisciplinado que era”, explicó González.
Este es el tercer intento por medio de diferentes tribunales cubanos, de solicitar la Libertad Condicional para Portal Contreras. Según su esposa, esto no ocurre por la interferencia de la policía política
“La prisión ha solicitado la condicional para Silverio y se la han denegado, pero todo es por manos de la Seguridad del Estado”, concluyó.
Silverio Portal Contreras, de 72 años de edad, fue condenado a cuatro años de prisión por los delitos de “desacato” y “desorden público” en junio de 2018. Se encuentra en la cárcel 1580 de San Miguel del Padrón, en La Habana, en delicado estado de salud.
En la cárcel perdió la visión de un ojo tras ser víctima de una golpiza provocada por las autoridades del penal, y por mucho tiempo se le han negado las visitas reglamentarias, así como las llamadas telefónicas.
En agosto de 2019 fue declarado Prisionero de Conciencia por la organización defensora de los derechos humanos Amnistía Internacional.