José Raúl Mulino, el presidente electo de Panamá, prometió esta semana cerrar una de las vías migratorias más utilizadas por los inmigrantes cubanos en los últimos años: el Darién.
"Para terminar la Odisea del Darién, que no tiene razón de ser (...), iniciaremos con ayuda internacional un proceso de repatriación con todo apego a los derechos humanos de todas las personas que están allí", dijo el recién electo presidente.
"Para que sepan los de allá y los que quisieran venir, que aquí el que llega se va a devolver a su país de origen", añadió Mulino, y prosiguió: "Nuestro Darién no es una ruta de tránsito, no señor, esa es nuestra frontera", declaró durante un discurso en el acto en que la Junta Nacional de Escrutinio lo proclamó formalmente como próximo presidente para el periodo 2024-2029.
La selva del Darién fue por muchos años uno de los tramos más difíciles en la larga travesía de los inmigrantes cubanos, desde Guyana hasta la frontera sur de los Estados Unidos.
Desde 2012, el propio Mulino, siendo entonces Ministro de Seguridad Pública de Panamá, alertó que la selva del Darién estaba siendo utilizada por los traficantes de inmigrantes.
La frontera colombo-panameña de 266 kilómetros, se extiende desde Cabo Tiburón, en el Caribe, hasta Punta Cocalito y Punta Ardita en el Pacífico. Se encuentra en el corazón del llamado "Tapón del Darién". Sólo hay dos poblados en la línea limítrofe: La Miel, en Panamá, y Sapzurro, en Colombia, ambos en la costa caribeña.
Numerosos informes de organizaciones de protección a migrantes y refugiados, reportajes de prensa e incontables testimonios dieron cuenta de los peligros extremos a los que se expusieron los inmigrantes cubanos, muchos de los cuales fueron víctimas de extorsión, violaciones y abusos. Algunos perecieron en el trayecto.
Después de noviembre de 2021, cuando Managua y La Habana pactaron un acuerdo de libre visado, que permitió a los cubanos acortar la larga travesía hasta la frontera de los Estados Unidos, el Tapón del Darién fue un tramo menos utilizado por los cubanos y la inmigración dese la isla hacia EEUU comenzó a registrar las mayores cifras de su historia, sobrepasando el medio millón de migrantes.
En el año 2021, el Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) de Panamá registró el paso de 15 mil cubanos por la selva del Darién y en 2022 un total de 5.961.
De acuerdo con datos del Proyecto Migrantes Desaparecidos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), 36 personas perdieron la vida en la Selva del Darién en 2022, aunque la organización advierte que la cifra podría ser mucho mayor, ya que muchos migrantes mueren en la travesía y sus restos "no son ni informados ni recuperados".
En 2023 sólo unos cientos de cubanos atravesaron la selva del Darién, pero Guyana sigue siendo la ruta más directa para los emigrantes cubanos que esperan llegar a Brasil y otros países sudamericanos.
Foro