Un campesino residente en Pitajones, al sur de Ciego de Ávila, que combinaba sus labores en una finca obtenida en usufructo y una unidad militar, fue expulsado de esta última luego de publicar un vídeo en las redes sociales en el que denuncia el decomiso de unos animales de su propiedad.
Arnaldo Hurtado Ruiz, de 45 años, dijo a Radio Televisión Martí que el pasado mes unas reses de su propiedad se escaparon de la finca y se las confiscaron.
Asegura que fue a todos los lugares del gobierno donde se tramita la petición para que se las devolvieran pero no obtuvo respuestas, y decidió entonces exponer su situación a través de un video que de inmediato fue publicado en las redes por Otoniel Cruz, su vecino y activista de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU).
Dijo que días después fue visitado por agentes de la seguridad del estado quienes, "con bates de aluminio y tono amenazante", intentaron amedrentarlo por haber expuesto la denuncia en las redes sociales.
También le hicieron llamadas telefónicas a su celular, por eso decidió que "cada vez que salía de la casa" se llevaba a sus hijos pequeños, "porque no me atrevo a dejarlos solos", señaló Hurtado.
Agregó que después de las amenazas hubo varios días de silencio y finalmente recibió el aviso de que podía ir a recoger las reses, pero está "esperando a conseguir un transporte para traerlas", agregó.
El campesino creyó que ya sus problemas se estaban resolviendo, sin embargo, este miércoles recibió la noticia de que él y su esposa ya no podían trabajar en la unidad militar cercana al domicilio donde ambos realizaban labores de aseguramiento.
"Ellos me dijeron que yo soy contrarrevolucionario, y por esas razones no podemos seguir ahí", precisó.
Ahora se le han estrechado los caminos para poder cubrir los gastos de la familia, y dijo que solo le queda "irme al monte a hacer carbón para podernos mantener", concluyó.
Otoniel Cruz aseguró que también ha recibido amenazas.
Relató que la pasada semana fue arrestado por agentes de la Seguridad del Estado, quienes lo increparon por dar curso a las denuncias a través de las redes sociales.
