Chen Ziming, considerado uno de los ideólogos del movimiento pro democrático de Tiananmen en 1989, murió a los 62 años en Pekín víctima de un cáncer de páncreas, informa hoy el diario hongkonés South China Morning Post.
El activista murió en la tarde de ayer en su casa de Pekín, tras una larga enfermedad por la que había intentado tratarse en Boston (Estados Unidos) a principios de este año, en un raro gesto del régimen comunista, que raramente permite a activistas de Derechos Humanos abandonar el país.
Chen, veterano activista e intelectual, fue una de las figuras clave de las protestas que entre abril y junio de hace 25 años pusieron en jaque al régimen comunista con demandas de mayor apertura y democracia por todas partes de China, y que acabaron en masacre.
Su muerte ha sido lamentada por muchos de sus compañeros en aquellas protestas, entre ellos Wang Dan, uno de los líderes del movimiento estudiantil de 1989 quien, desde su exilio en Estados Unidos, tuvo hoy palabras de recuerdo para Chen, a quien definió como su "profesor y amigo".
"Fue uno de los intelectuales más sobresalientes de China, y contribuyó al movimiento democrático del país en los pasados 40 años", señaló Wang en declaraciones a South China Morning Post.
Chen participó en protestas pro democracia ya en 1976, incluso antes de la muerte de Mao Zedong, y también en 1979, diez años antes de ser uno de los principales impulsores de las protestas de Tiananmen.
Tras la sangrienta represión de junio de 1989, en la que un número aún no revelado de estudiantes murió a manos del Ejército chino, Chen fue condenado por "actividades contrarrevolucionarias" a 13 años de cárcel, en sentencia judicial dictada en 1991.
Tres años después de esa condena fue puesto en libertad por sus problemas de salud, pero fue encarcelado nuevamente tras firmar una petición en la que pedía la liberación de prisioneros políticos en China.
Liberado por segunda vez en 1996, otra vez por cuestiones médicas, Chen permaneció en arresto domiciliario hasta 2002.
Además de por su activismo político, Chen fue conocido por su labor como economista, que le llevó a fundar en los años 80 el Instituto de Investigación en Ciencias Económicas y a trabajar como editor en Economics Weekly, publicación que defendía la libre economía de mercado.
"Si hubiera vivido en una sociedad normal, habría hecho enormes contribuciones en el mundo académico, los negocios, la ciencia o la tecnología. Incluso podría haber ganado un Premio Nobel… desgraciadamente, nació en China", se lamentaba el también activista Dai Qing en declaraciones hoy al South China Morning Post.
"Sufrió mucho, pero fue valiente e inteligente. No tuvo ni fama ni fortuna, pero fue sincero hacia la sociedad", resumió Dai al diario hongkonés.